Los amigos son como los zapatos. El calzado es para muchos, la prenda más importante del atuendo. Dicen que por el calzado se analizan algunos rasgos de la personalidad de la gente: un zapato lustrado, adecuado a la ocasión y al atuendo, te refiere a una persona ordenada que atiende a los detalles, en contraposición a lo que te dirían de una persona sus zapatos sucios, feos o elegidos de manera equivocada.
Pues algo así sucede con las amistades, los amigos son parte fundamental de nuestra vida, y hay una diversidad enorme para cada estado de ánimo, para cada actividad y ocasión, la amistad puede desarrollarse en un momento determinado y durar una temporada o muy largos años.
A pesar del famoso dicho, "Dime con quién andas y te diré quién eres", no debemos generalizar ni dejarnos influenciar por códigos ni estereotipos. Los gustos de las personas son tan variados y la gente tan diversa en sus intereses y pensamientos, que no les podemos calificar con determinación por las cosas que usan o por las personas con quienes conviven.
Reitero, los amigos al igual que el calzado, pueden o no agradar a los demás, pero si en ese momento son lo que necesitas y te acomoda, disfrútalos.
A continuación te comparto cinco aspectos a considerar para clasificar a las amistades y cinco cosas que debes hacer para conservarlas.
Para clasificar a tus amigos, propongo cinco tipos de amistad:
1. Los fraternales. Con ellos existe una relación que puede ser a veces ocasional pero muy honesta y afectiva, son con lo que te sientes como en familia, saben cómo eres, saben tus problemas, te dan consuelo, consejo y sinceramente celebran tus glorias. Están mutuamente en el momento que se necesitan.
2. Los de Relajo. Con estos amigos hay confianza para dejarse llevar por las situaciones y las emociones, se comparten incluso asuntos personales pero en un ambiente relajado, son amigos para compartir, para bromear y divertirse a pleno gusto, con ellos cualquier pretexto es válido para salir de la rutina y ser tal cual somos.
3. Los de Ocasión. Con ellos existe una relación agradable pero superficial, por lo general con ellos compartes una actividad en el trabajo, un deporte o algo en común a través de los hijos, entre familiares o amigos. Con frecuencia sucede que acudes a ellos o a eventos por compromiso más que por voluntad.
4. Los Profesionales son los que te aprecian por tu capacidad, por tu posición o intereses compartidos y por ello colaboran en equipo, comparten información útil para desempeñar el trabajo, y se favorecen con recomendaciones o contactos. Con estos amigos te reservas y cuidas tu imagen.
5. Los de Complicidad. No contamos en todo momento con amigos de este tipo, pero a veces surgen por necesidad de supervivencia a circunstancias específicas; resultan de un interés en común para mantenerse en una condición o situación y representan un apoyo práctico y emocional en la consecución de objetivos mutuos.
Cualquier tipo de amistad que has ganado, implica un esfuerzo de atención que merece que apliques, pues las amistades aligeran la vida y nutren el crecimiento humano. Es importante que conserves a tus amistades de acuerdo a tus prioridades, intereses, afectos y necesidades.
Por eso te recomiendo cinco elementos de acción que debes aplicar en cualquier tipo de amistad:
1. Escucha lo que tienen qué decirte, no seas el tipo de persona que sólo habla de sí mismo y de sus cosas; las personas que actúan así, generalmente no se percatan de su actitud hasta que alguien les señala. Aprende a identificar en qué momentos y con qué tipo de amigos es necesario que calles más de lo que deseas hablar. Escuchar también incluye comprender cuando la amistad se ve afectada por conflictos o malos entendidos; no te predispongas, no te dejes influenciar por terceras personas, escucha al amigo, comprende y si es posible, perdona porque todos nos equivocamos y merecemos oportunidades para corregir.
2. Respeta y considera a las personas que son importantes para tus amigos, es posible que no te simpaticen algunos miembros de su familia o alguna persona cercana a ellos pero procura ser amable y tolerante, dado que a su vez, es una expresión de respeto hacia tus amigos.
3. Sé leal. Como en cualquier relación, la amistad genera compromisos y uno de los más importantes es la lealtad. Es una cualidad que te permite ser empático con los asuntos de la otra persona, entonces procuras disposición para estar en las buenas y malas y desarrollar un sentido de protección, sin embargo, la imprudencia a veces nos asalta en muchas formas. Evítala de manera que nunca traiciones a un amigo ni exhibas por ningún motivo las confidencias que te haya hecho; hacerlo es el tipo de conducta que más lastima y difícilmente se perdona.
4. Habla de frente. Cualquier cosa que tengas que decir de tus amigos, especialmente si es negativo, hazlo primero en su cara. Mi mamá siempre dice que si no tienes algo bueno qué decir de alguien, mejor calles; es lo más sano, pero si no puedes evitarlo, mi papá me enseñó que si realmente necesitas despotricar, debes hacerlo en primer lugar frente al susodicho y tener el valor de hacerlo, de otra manera quedas como un vil chismoso. Hablar de frente, es también ser honesto, aún cuando algunas veces las circunstancias te condicionan o te obligan a omitir, a fingir o mentir, procura de manera extrema evitarlo.
5. Agradece. Para mí, la mejor forma honrar a una persona es recordarla en un día memorable, una forma de agradecer la amistad es nunca dejar que pase inadvertido su cumpleaños, para casi todas las personas es motivo de festejo el día de su nacimiento y es muy grato ser recordado y recibir muestras de cariño ese día.
Si eres cuidadoso y constante en llevar a cabo algunas o todas estas recomendaciones, te auguro amistades sinceras, sólidas y duraderas.
Espero que te sean de utilidad. Como siempre, yo me encuentro en el proceso de aprender.
Feliz día del amor y la amistad.
En Twitter, @CachoYu.
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