Estimado lector, muy recientemente tuve el gusto de escuchar a Don Agustín Irurita Pérez, un muy distinguido mexicano, quien logró crear junto con más de 10,000 mexicanos, uno de los grupos transportistas más importantes del país.
Su testimonio es de especial relevancia porque no estamos hablando de uno de esos casos de escándalo, abuso y negligencia. Todo lo contrario, es un gran ejemplo de responsabilidad y compromiso social, siempre sustentado en principios tales como el respeto a la dignidad de toda persona, la solidaridad, la subsidiariedad y la búsqueda del bien común.
De sus interesantes reflexiones, sugiero algunos consejos positivos, inferidos por un servidor, que pueden funcionar a toda persona de bien:
No tengamos miedo a corregir y cambiar hábitos o circunstancias que nos impidan crecer como personas o instituciones. Siempre habrá la oportunidad de innovar y buscar mejores formas, acordes a los principios de cada uno.
Recordar que el dinero es una herramienta indispensable, pero su eficacia se debe valorar en la medida en que ayuda al crecimiento humano de las personas involucradas en una empresa, instituciòn o sociedad.
La responsabilidad de autoridades y líderes sociales para no promover, ni permitir situaciones o prácticas contrarias al bien común. Por el contrario, los líderes políticos y sociales deben ser ejemplo de compromiso y responsabilidad con las mejores causas, siempre acordes a principios y valores, no a coyunturas pragmáticas.
En toda empresa, institución y sociedad se obtendrán siempre los mejores resultados en función de educar, dar ejemplo y vivir principios positivos. Porque actuar solamente en reacción a problemas y consecuencias de falta de convivencia sana, será siempre mas caro y menos productivo.
Hay que atreverse a comunicar y construir espacios de la manera mas abierta posible.
Dice el dicho que el alumno debe superar al maestro, y esto no aplica solamente en superación técnica o académica. Sino en la conformación de equipos directivos capaces profesional y moralmente.
No basta con sacar adelante la propia responsabilidad profesional. El compromiso y responsabilidad social atañe a todo ciudadano para ser parte de la construcción de una mejor sociedad.
La vida es incertidumbre... Y la tenemos que enfrentar.
Lo mas importante en la vida es la CONFIANZA, entendida esta como un valor, algo positivo. No como complicidad.
Sobre la realidad actual de México: hay cosas que nos gustan y cosas que no nos gustan. Algunos defienden intereses y otros defienden principios. Pero los cambios positivos en el mundo se dan cuando la gente que defiende principios toma liderazgo.
El cuestionamiento es personal: cuál es mi rol social, mi compromiso y mi participación como ciudadano?. Probablemente se cometerán menos errores si los ciudadanos participan.
No se puede ser solamente crítico, si no se da un testimonio. Y muchas veces hay malos testimonios.
Estas son algunas reflexiones que me parecen de la mayor relevancia para todos y cada uno de los ciudadanos.
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