En Cuba no se practica la tradición de Thanksgiving como en los Estados Unidos, pero es tan bella que debíamos los cubanos y latinoamericanos en general también comenzar a practicar.
Allá en mi isla cubana del Caribe no se hace. No se trata de si se cree en Dios o no se cree, ni de si se vive dentro de Cuba o en otro país latinoamericano con necesidades. Siempre hay motivos para dar gracias. Ser agradecido no es un problema de ideología, de comunismo o capitalismo, es de ser un ser humano agradecido.
No soy para nada un copiador absoluto de todo lo relacionado con los Estados Unidos para nuestros países latinoamericanos. A modo de ejemplo nunca debemos imitarlos en el criminal sistema que tienen de veneración y ventas de armas de fuego. Viven con una contradicción: les duele las matanzas en las escuelas y en las calles y sin embargo cada dia producen y venden mas armas de fuego como los panaderos hacen y ofertan diariamente sus panes.
De lo que trato es de considerar que debemos ser agradecidos y también dedicar los cubanos ese día un momento anual especial para agradecer, un día para dar gracias a cualquiera que nos oiga aquí en la tierra o allá arriba. Es tratar de vernos agradecidos por lo que tenemos, hemos tenido o recibiremos. No solamente se debe dar gracias en países libres por lo material que se puede tener. Dar gracias al aire, al universo, a uno mismo debieran hacerlo todos los seres humanos vivan donde vivan. Hay que dar gracias por tener o haber tenido buenos abuelos, padres y hermanos, dar gracias por el techo (aun deteriorado), por los amigos y buenos vecinos y hasta por los enemigos porque hasta a ellos tenemos que agradecerle que nos esfuercen a ser mejores y hacer mejor todos lo que emprendemos, gracias por la pareja que ha estado a nuestro lado fielmente en momentos no solo buenos.
Yo doy gracias por todo y de manera especial lo hago desde hace muchos años por la mujer que un día llego a mi vida con 17 abriles ella y 18 yo, me abrió su corazón y juntos no hemos puesto viejos. Doy gracias porque me aguanto 20,000 paquetes y yo no he tenido que aguantarle ninguno a ella con excepción de darme hijos con más errores que virtudes y que ahora nos han llenado la casa de nietos (Oscarito 2 varones, Yuximi otro varón y Enriquito 3 hembras.
Hace unos días le pregunte a mi esposa Tania quiero dar gracias adelantadas por ti. ¿Qué quieres? Respuesta: Ir a Punta Cana nuevamente. Es adicta a Punta Cana y la hice feliz.
Gracias también a Huffington Post por haberme invitado a ser parte de esta linda familia, gracias a los que critican mis notas y a los que la aplauden. A todos gracias por su amistad.
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