Peligros de tener un peso bajo y cómo solucionarlo

La delgadez puede ser un síntoma de una enfermedad grave o, por el contrario, ser la causa de un problema de salud.
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Close-up Of A Woman Measuring Waist With Measuring Tape
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Para muchas personas, la delgadez es un problema de estética que les ocasiona complejos e inseguridades.

Sin embargo, también puede ser un síntoma de una enfermedad grave o, por el contrario, ser la causa de un problema de salud.

¿Es peligroso estar muy delgado? ¿Cómo se consigue un aumento de peso saludable?

Posibles causas de un peso demasiado bajo
A menudo, tener un peso demasiado bajo puede ser la consecuencia de un problema de salud o enfermedad.

Por este motivo, muchas personas delgadas no consiguen aumentar de peso incluso después de haberlo intentado todo.

A continuación, repasamos algunas enfermedades que pueden estar involucradas en la pérdida de peso continua o la incapacidad de subir de peso:

Enfermedad celíaca: la pérdida de peso es uno de los principales síntomas que sufren las personas con intolerancia al gluten.

Trastornos de conducta alimentaria (TCA): la anorexia nerviosa o la bulimia, entre otras, son enfermedades que provocan una elevada y rápida pérdida de peso.

Diabetes: un tratamiento inadecuado contra la diabetes también puede causar una reducción de peso considerable.

Hipertiroidismo: un síntoma provocado por una secreción excesiva de hormonas tiroideas es la pérdida de peso.

Infecciones: ciertas infecciones provocadas por parásitos pueden disminuir significativamente el peso de la persona que las padece.

Cáncer: la mayoría de cánceres causan un aumento de la quema de calorías y, por consiguiente, una reducción del peso.

Riesgos de tener un peso por debajo de lo normal
De acuerdo con el índice de masa corporal (IMC) que se calcula dividiendo los kilos que una persona pesa entre el cuadrado de los metros que mide (kg/ m2):

Una persona está por debajo de su peso normal cuando su IMC es inferior a 18,50.

Hay 3 niveles que determinan el grado de delgadez:

  • < 16,00: delgadez extrema
  • 16,00 - 16,99: delgadez moderada
  • 17,00 - 18,49: delgadez leve

¿Qué riesgos existen cuando se está demasiado delgado?

  • Mayor riesgo de infecciones.
  • Posible desarrollo de osteoporosis y posteriores fracturas.
  • Deterioro de la función inmune.
  • Problemas de fertilidad.
  • Mayor riesgo de muerte prematura.
  • Posible desarrollo de sarcopenia (pérdida de masa muscular y fuerza)
  • Mayor riesgo de demencia.

Consejos para aumentar de peso
Antes de seguir cualquier recomendación, es aconsejable acudir a un médico si has experimentado una repentina y pérdida de peso durante los últimos meses.

Si la causa de tu bajo peso es una enfermedad, los siguientes consejos podrían incluso empeorar la situación.

1. Lleva una alimentación sana y equilibrada.
Elige alimentos naturales y saludables y evita cualquier producto procesado.

2. Consume alimentos ricos en calorías.
Aumenta la ingesta de cereales, lácteos, carne, frutas deshidratadas, grasas y aceites saludables, tubérculos...

3. Realiza al menos 3 comidas al día.
Desayuna, almuerza y cena con platos ricos en proteína, hidratos de carbono y grasa. Si tienes hambre, pues tomar snacks saludables como fruta, yogur, frutos secos...

4. Limita el consumo de verduras.
Las verduras tienen pocas calorías pero son muy saciantes, por lo que dificultarán la ingesta de otros alimentos.

5. Evita beber agua antes de comer.
Tomar agua antes de las comidas hará que te sientas lleno y comerás menos.

6. Ingiere más calorías.
Se recomienda consumir entre 300 y 500 calorías más al día para aumentar de peso a un ritmo lento pero sostenido.

Se recomienda consumir entre 700 y 1000 calorías más al día para aumentar de peso a un ritmo más acelerado.

7. Practica deporte.
Realizar levantamiento de pesas entre 2 y 4 veces a la semana evita la acumulación de grasa procedente de las calorías consumidas y favorece el desarrollo de masa muscular.

8. Usa platos más grandes.
Diversos estudios han demostrado que si nos servimos menos, comemos menos y, por tanto, si nos servimos más, comemos más.

9. Consume alimentos ricos en proteína.
Las proteínas sacian el apetito y te incitan a comer menos, además de hacer que las calorías que consumes se transformen en músculo en lugar de grasa.

10. Respeta las horas de sueño.
Dormir lo suficiente y bien facilita el aumento de peso.

¿Sencillo? Pruébalo y cuéntanos tu experiencia.

En Twitter, @nutricionsinmas.

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