Si estás buscando otras maneras de tener más espacio para almacenar en tu cocina, una idea es incorporar una isla, que además te añadirá otra superficie donde preparar la comida.
En una cocina bastante amplia, el lugar ideal sería justo en el centro de la misma, para que sirva como un enfoque decorativo. Si no tienes el espacio suficiente, entonces opta por una isla de cocina móvil, o sea, que tenga ruedas, y puedes ubicarla contra la pared o debajo de un ventana con taburetes a ambos lados. De este modo, funciona como una mesa y cuando necesites usar la isla para cocinar, simplemente la mueves a donde te haga falta.
Recuerda que la isla de cocina no tiene que ser necesariamente del mismo acabado que el resto de los gabinetes fijos en la cocina. La base puede ser de un color completamente diferente, pero trata de que complemente el estilo de la cocina. La encimera puede ser de acero inoxidable, azulejos, o hasta un tablero de madera que le da mucho carácter a una cocina y cuyo mantenimiento es fácil. La idea es lograr que la isla luzca como un mueble de acento dentro del espacio y listo en todo momento para usar por el chef gourmet del hogar.
Para conseguir aún más almacenamiento, puedes añadir un estante de metal con las repisas expuestas para exhibir las ollas de cocina como parte de una decoración moderna, o hasta un armario antiguo para guardar la vajilla, copas, manteles, botellas de vino, y otros adornos como si fuese una vitrina. ¡Esto le dará un estilo ecléctico al ambiente y un lugar donde tendrás a mano todos los materiales necesarios para entretener!
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