Despiertan las flores en el desierto. ¡No más ablaciones!

Una noticia que a pesar de su incalculable importancia, ha pasado desapercibida en la mayoría de los medios de comunicación hispanos de los EEUU de forma inexplicable. Quizá lo sentíamos muy lejos, muy ajeno a nosotros y a nuestra cultura o tal vez, preferimos dejarlo fuera de foco porque hay verdades que deseamos ignorar o son muy fuertes para enfrentarnos a ellas y aceptar que desde la comodidad de nuestros hogares, nos incomodan. No es mi caso.
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Afghan female labourers work at a brick factory in the outskirts of Jalalabad on November 3, 2012. Over a third of Afghans are living in abject poverty, as those in power are more concerned about addressing their vested interests rather than the basic needs of the population, a UN report said. AFP PHOTO/ Noorollah Shirzada (Photo credit should read Noorullah Shirzada/AFP/Getty Images)
Afghan female labourers work at a brick factory in the outskirts of Jalalabad on November 3, 2012. Over a third of Afghans are living in abject poverty, as those in power are more concerned about addressing their vested interests rather than the basic needs of the population, a UN report said. AFP PHOTO/ Noorollah Shirzada (Photo credit should read Noorullah Shirzada/AFP/Getty Images)

ablaciones

La Asamblea General de Naciones Unidas aprobó hoy por primera vez una resolución que condena la mutilación genital femenina y pide a los Estados miembros medidas de castigo y educativas para frenarla.

Una noticia que a pesar de su incalculable importancia, ha pasado desapercibida en la mayoría de los medios de comunicación hispanos de los EEUU de forma inexplicable. Quizá lo sentíamos muy lejos, muy ajeno a nosotros y a nuestra cultura o tal vez, preferimos dejarlo fuera de foco porque hay verdades que deseamos ignorar o son muy fuertes para enfrentarnos a ellas y aceptar que desde la comodidad de nuestros hogares, nos incomodan. No es mi caso.

La primera vez que oí hablar de una ablación no sabía el significado de la palabra. Sin embargo, Me bastó mirar unos ojos llenos de lágrimas y escuchar el aterrador relato de una voz entrecortada, para comprender que nunca podría olvidarlo porque a partir de ese momento no solo quedaría grabado en mi mente sino apegado a mi conciencia.

En mi búsqueda de "Mujeres con Pantalones" para la presentación de la organización que presido, me encontré con Wairis Diri, una mujer espectacularmente hermosa por fuera pero aún más bella por dentro. Una Flor del desierto que logró escapar de la violencia y miseria que la condenaban en Somalia ,para convertirse en la rosa negra más apreciada de las pasarelas de Nueva York. Su historia, en si misma, era una historia de superación. Pero su pasado, el que tuvo que dejar dormido para lograr sobrevivir , no solo era su presente y su lucha, sino el futuro de millones de niñas que son sometidas a la fuerza a la ablación, aún hoy en el mundo. La práctica, salvaje e inhumana consiste en mutilar el clítoris y los labios menores y mayores y su posterior costura con alambre, hilo de pescar o una pasta casera que actua de pegamento y que da como resultado un pequeño orificio por el que menstruar.

Se calcula que más de 135 millones de mujeres y niñas padecen las consecuencias de estas prácticas brutales ,que no son más que una forma de violencia contra la mujer, por el único hecho de haber nacido mujer. Es una castración, un castigo sin límites, una condena. A pesar de estar prohibido en muchos países, más de 6.000 pequeñas siguen siendo mutiladas a diario no solo en África o en Asia sino en Europa o EEUU a través de los inmigrantes que lo consideran una tradición ancestral cuando deberíamos hablar en mayúscula de violencia de género. Paradójica además, porque para más INRI, las propias mujeres intervienen en esta barbarie ya sea participando o consintiendo esta ceremonia atroz y desmedida, propia de sistemas de dominación patriarcales en el que el hombre impone y decide lo que debe hacerse con una mujer, sometiéndolas a las peores vejaciones y castigos y al deber de obediencia. Grossa equivocación.

Waris Diri es el mejor ejemplo de ello. Ella supo mejor que nadie burlar a esos diablos y escapar del infierno a pesar de haber sido mutilada salvajemente a los cinco años. Con solo escucharla puedes sufrir en carne propia el dolor que hace que miles de niñas en el mundo deseen morir antes de convertirse en mujeres,. Aunque , según cuenta, la ablación se hace cada ve a una edad más temprana, para evitar que puedan juzgar y abolir la práctica cuando sean mayores. Waris habla en primera persona, fue la primera mujer que se atrevió a denunciar públicamente la mutilación genital femenina y logró a través de su testimonio, ser nombrada embajadora especial de la ONU en la lucha contra esta atrocidad.

Sus palabras , su voz entrecortada y sus lágrimas me hicieron participe de un desgarrador dolor que por momentos fue mío... Su testimonio, que ahora comparto con ustedes, por encima de una oda al sufrimiento, es un canto a la esperanza:

"Amo a mi madre, amo a mi familia y amo África. Desde hace más de 3.000 años las familias creen fehacientemente que las jóvenes a las que no se ha hecho la ablación son impuras porque lo que tenemos entre las piernas es impuro y debe ser extirpado y cerrado después como prueba de virtud. La noche de bodas, el marido coge una una navaja y lo vuelve a abrir para penetrar a la fuerza a su esposa. Si la ablación no se hace, la mujer no se casa, es expulsada de su aldea y tratada como una prostituta. A consecuencia de estas mutilaciones, las mujeres enferman física y psicológicamente por el resto de sus días. Yo sobreviví, pero dos de mis hermanas no lo lograron. Sofía murió desangrada después de ser mutilada y Lama murió en el parto con su bebé aún dentro de su vientre. Hasta que punto se fortalecería nuestro mundo si un ritual tan salvaje fuese abolido? Existe un proverbio en mi país que dice que el ultimo camello de la fila camina tan lento como el primero... Lo que nos pasa a nosotras, afecta a todos los demás. Cuando era una niña decía que no quería ser mujer. Para que? Cuando sufres tanto dolor y eres tan desdichada... Sin embargo, Ahora que he madurado, me siento sin orgullosa de lo que soy. Por el bien de todos intentemos cambiar lo que es ser una mujer"

Lo escribo y vuelvo a llorar recordándolo. Su novela "La Flor del Desierto" conmocionó al mundo con su historia, como a mi me conmocionaron sus palabras. Se que aún queda un largo camino, pero hoy mi conciencia y mi alma se sienten aliviadas ,Se ha dado un gran paso para cambiar lo que es ser mujer en algunas culturas. Hoy hay esperanza para las Flores del Desierto.

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