Más mujeres VIP para nuestra historia

Como, en mi vida tengo una lista exclusiva de mujeres que considero importantes a nivel social. Aquí le presento la segunda parte de mi lista de mujeres VIP, esas que hoy están escribiendo nuestra historia colectiva.
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Como les compartí recientemente , en mi vida tengo una lista exclusiva de mujeres que considero importantes a nivel social. Aquí les presento la segunda parte de mi lista de mujeres VIP, esas que hoy están escribiendo nuestra historia colectiva.

6. Bella
Bella llegó a mi casa recomendada para un trabajo de ayuda doméstica. Si bien entrevisto cabalmente a todas mis nuevas empleadas, también respeto su privacidad y no les hago preguntas indiscretas sobre su vida. Prefiero que ellas me vayan contando poco a poco sus historias, a medida que van ganando confianza en su trabajo.

Entre las tareas de Bella estaba preparar el almuerzo -y confieso que no se me da bien la cocina- para que estuviera listo cuando mi esposo e hijos regresan a la casa del trabajo y la escuela. Usualmente busco las recetas y las escribo a mano en un cuaderno dedicado a hacernos de una colección de platos preferidos.

"Doña, algo le voy a pedir por favor", me dijo Bella una mañana. "Cuando usted escriba la receta, hágalo en letra de molde. Si lo hace en "letra junta" se me hace difícil entender".

En ese momento, la realidad de su analfabetismo me cayó encima como un balde de agua fría. Me sentí empapada en la verdad de que no sabía leer ni escribir. A los 33 años y madre de 4 hijos, Bella no había ido nunca a la escuela. Incapaz de seguir al margen de tan absoluto rezago, hice una pausa en nuestras labores cotidianas, colamos un café y me senté a escuchar su historia.

Bella me contó que ella nació en un batey, a una madre también analfabeta y a un padre muerto antes de que ella naciera. Cuando su madre la llevó a inscribir en el registro civil para obtener su justo certificado de nacimiento, los oficiales se percataron de que ésta hablaba español con un acento extranjero. Al ser su padre un "fantasma", le indicaron que era imposible inscribirla como hija de una madre soltera. A la madre de Bella le hacía falta un hombre para brindarle la identidad -la humanidad legal- a su hija.

Y así, sin certificado de nacimiento, sin identidad legal y sin nombre, el sistema convirtió a Bella en otra fantasma de la sociedad. Su madre nunca la pudo inscribir en la escuela, Bella nunca pudo aprender formalmente el abecedario, nunca pudo nutrir su vida con conocimientos académicos. Su infancia se redujo a seguir los pasos de su madre en el batey hasta que un hombre se la llevó y comenzó su vida adulta. Se embarazó y se tuvo que lanzar a la calle a trabajar para ganarse el sustento de sus hijos.

A Bella traté de alfabetizarla antes de que dejara su trabajo. Todavía no sabe escribir su nombre.

7. Sandra
Sandra era a todas luces y en todas las portadas de revistas, una mujer de vida perfecta. Doctora en medicina por educación y exreina de belleza, era la misma encarnación del paquete completo de inteligencia y glamour. Madre de 3 hijos y casada por más de 30 años con un magnate de medios de comunicación y ministro gubernamental, gozaba de una vida social privilegiada, viajes por el mundo y vestidos de diseñador. Esa era su historia pública.

Hasta el día en que difundió en Twitter las fotos de su rostro amoratado, alegando que había sido su "adorado" esposo -su compañero de vida con quien recientemente había renovado los sagrados votos del matrimonio- quien vilmente la había golpeado.

¿Por qué publicar el ataque en un medio social de alcance mundial para denunciar el abuso de esposo?, se preguntaron muchos. ¿Acaso no hubiese sido mejor reportarlo a las debidas autoridades policiales y de justicia? Esas son preguntas difíciles de contestar sin recurrir al más absoluto escepticismo.

Sandra era en su realidad una prisionera. Lo peor del caso es que a las víctimas de abuso ya pocas veces le creen. "No, no puede ser verdad, se lo está inventando, se quiere vengar de alguna infidelidad, quiere sacarle más dinero al marido..." son todas malas justificaciones que se inventa la gente para re-victimizar a las víctimas de violencia doméstica.

Sandra sencillamente no aguantó más. Su marido estuvo décadas haciéndola dependiente de él, jamás le permitió ejercer su profesión, la monitoreaba constantemente, velando sus salidas siempre con un chofer que podía hacer de soplón. Su marido la había convertido en su trofeo.

Tras su denuncia, Sandra sigue luchando en las cortes con la esperanza de obtener una pizca de justicia.

8. Justa
Al igual que Sandra, Justa es una de esas mujeres que sudan a diario por su independencia y no logran salir de las garras de un hombre por más que lo intentan. Existe, sin embargo, una crucial diferencia entre ambas. Justa es pobre y necesita trabajar. Ella no puede darse el lujo de quedarse sentada en su humilde casa en Barahona sin ganarse su dinerito.

A Justa la veo casi todos los días y me mantengo al tanto de su vida. Tiene días buenos y días muy malos. Como los que vivió y yo viví junto a ella por asociación en la pasada época navideña.

Aunque lleva muchos años separada del padre de sus 3 hijos, quienes por fortuna ya tienen la edad para estar bien encaminados en sus estudios; aunque Justa cuenta el apoyo de unas hermanas que la ayudan a velar por ellos y su casa cuando ella está trabajando en la Capital, Justa no logra romper el nexo con un hombre a quien teóricamente ya no le tiene que rendir cuentas.

Al punto que su situación se puso bien mala el diciembre pasado. Los hijos de Justa empacaron sus maletas para pasar la temporada de fiestas en la casa de su padre en la Capital, bajo la impresión de que disfrutarían celebrando. Pero no hicieron más que llegar, cuando éste les preguntó dónde andaba Justa, seguro de que le dirían que estaba consumiéndose en sus penas en su casa en Barahona. Sus hijos, sin estar debidamente preparados para contestarle, le revelaron que Justa estaba trabajando como lo ha hecho en secreto durante años.

A su exmarido esta revelación lo llenó de furia, porque a él no le da la maldita gana de que ella trabaje, que perciba unos ingresos, aunque sus hijos ya no la necesiten para cambiarles los pañales. En medio de su ira, el hombre sacó los puños y le cayó encima a golpes a sus propios hijos. Por suerte los muchachos de fuerza y juventud lograron neutralizarlo y salir huyendo.

Justa tuvo que dejar su trabajo temporalmente y regresar de emergencia a Barahona bajo la amenaza de que su exmarido iba a "acabar" con ella y con sus hijos tan pronto los encontrara.

Quizás, por suerte, los golpes de los hijos en defensa de su madre han resultado más fuertes que las amenazas de un potencial asesino. Justa ha vuelto a trabajar.

9. Francina
Pronto se cumple el primer aniversario del día en que a Francina le robaron cruelmente la vista, aquél fatídico 23 de noviembre de 2012. Ese día a nosotros los que transitamos cotidianamente con nuestros hijos por las calles más céntricas y exclusivas de la Capital también nos arrebataron la paz. Las imágenes de las cámaras de seguridad que captaron el momento en que a Francina la dejan tirada desangrándose en la calle, son parte de nuestras peores pesadillas.

Ese día dos viles asesinos con demasiadas pistolas y ningún respeto a la vida, la dejaron ciega de un disparo en la cabeza en medio de un atraco para despojarla de su auto. Francina bien dice que está viva de milagro.

Ellos iban huyendo a toda prisa tras robarle el bolso a una señora mayor del vecindario cuando se toparon con Francina tranquilamente manejando su auto. Seguramente la vieron mujer, sola y no lo pensaron dos veces antes de disparar. No vieron que Francina era una joven estudiada, ingeniera, profesional, productiva y con grandes aportaciones a la sociedad de la que ellos participan. No vieron que Francina, con su trabajo, les hace la vida mejor a ellos, aunque ellos no se lo puedan reconocer. No consideraron que Francina tiene una familia que la quiere y la necesita viva. No. Los asesinos no piensan en nada de eso dentro de su barbarie.

Por suerte Francina no murió. Ha estado todos estos meses en un arduo proceso de cirugías, tratamientos y recuperación para acostumbrarse a seguir adelante con su discapacidad física. Pero durante todo este trance, Francina se ha crecido ante sus circunstancias y se ha convertido en un modelo de fortaleza mental y espiritual. Los buenos integrantes del pueblo dominicano se han visto reflejados en ella, en su sufrimiento y en su superación.

Y por esto, Francina se ha ganado su lugar en la historia.

10. María José
La historia de María José es la historia de miles de seres humanos nacidos en la República Dominicana hijos de extranjeros -mayormente haitianos- que ahora están sujetos a perder su nacionalidad. La Sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional dominicano, emitida el pasado 25 de septiembre, así lo establece por su aplicación retroactiva al año 1929 de nuevos criterios para otorgar la ciudadanía a los nacidos en este país. Es mejor que la vean, prestando atención a la siguiente entrevista realizada por la periodista Edith Febles.

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¡Adiós a la mujer perfecta y bienvenida la mujer libre!

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