Denny Hamlin y una promesa cumplida

Casi 80 años después - con apenas unos días de diferencia-, Denny Hamlin imitó al legendario Babe Ruth y tal como lo hizo el jugador estrella delos Yankees de Nueva York, el piloto del auto #11 FedEx Freight Toyota, cumplió al pie de la letra.
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Denny Hamlin celebró su victoria en el New Hampshire Motor Speedway imitando a Babe Ruth y su legendaria pose al anticipar un home run durante la Serie Mundial de 1932 entre los Yankees de Nueva York y los Cachorros de Chicago. (Foto: Todd Warshaw/Getty Images for NASCAR)

Casi 80 años después - con apenas unos días de diferencia-, Denny Hamlin imitó al legendario Babe Ruth y tal como lo hizo el jugador estrella delos Yankees de Nueva York, el piloto del auto #11 FedEx Freight Toyota, cumplió al pie de la letra.

Hamlin había hecho la promesa via Twitter desde Chicago, luego de un pésimo resultado en la primera carrera del Chase final de la Serie Sprint de la NASCAR, donde se quedó sin gasolina en la última vuelta por un error de su equipo de mecánicos, tuvo que resignarse a un puesto 14, muy lejos de los líderes.

También había sido en Chicago donde Ruth había pronosticado que pegaría un home run el 1 de octubre de 1932 durante el quinto inning del tercer juego de la Serie Mundial contra los Cachorros de Chicago. Ruth cumplió su promesa con lo que escribió un capítulo más en su carrera y leyenda.

Hamlin dominó la segunda Carrera del Chase final de la NASCAR en el New Hampshire Motor Speedway y logró su quinta Victoria de la temporada -más que ningún otro piloto de la Serie Sprint- con lo que ahora marcha tercero en la clasificación por el título, concretamente a solo siete puntos del líder Jimmie Johnson.

La victoria resultó más sorprendente dado el hecho de que Hamlin arrancó desde el puesto 32 luego de que sus mecánicos inflaron las ruedas de su Toyota con la presión incorrecta, lo que afectó su desempeño durante la ronda de clasificación.

Además de su excelente desempeño al volante, lo que más impresionó a los expertos y aficionados, fue la excelente actitud del piloto, quien en el pasado había mostrado algo de inmadurez al criticar a sus mecánicos por los errores cometidos.

Ahora mostró un verdadero espíritu de equipo y pudo celebrar a lo Babe Ruth.

"Nadie quiere sonar demasiado arrogante, pero sabía de lo que éramos capaces en esta carrera", dijo el piloto. "Sé que cometimos un par de grandes errores, pero sabía que teníamos un auto suficientemente rápido para recuperarnos".

La victoria de Hamlin representó la número 100 para Joe Gibbs, el dueño del equipo, quien ganó tres Super Bowls como coach de los Washington Redskins, con lo que se completa el triángulo de los tres deportes más populares de Estados Unidos: béisbol, la NASCAR y el football de la NFL.

Hamlin no hizo ninguna promesa para la próxima carrera d la Chase final de la Serie Sprint de la NASCAR, el próximo fin de semana en Dover, pero todo mundo sabe cuál es su objetivo: el campeonato, tal como lo logró Babe Ruth con los Yankees hace 80 años.

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