








Y así podemos seguir describiendo casos espeluznantes en los que la Iglesia formó parte de manera directa o simplemente haciendo caso omiso, como en el genocidio de Ruanda, el holocausto nazi, el gran fraude del Banco del Vaticano, el verdadero papel del ala anticomunista Opus Dei, los lazos con la dictadura militar argentina comandada por Videla, o con Pinochet en Chile o con Franco en España, por citar solo algunos. La auténtica espiritualidad se encuentra más allá de los dogmas religiosos y ya en pleno siglo XXI va siendo hora de despertar la conciencia y abrir los ojos para conocer la verdad histórica de la institución religiosa que ha mentido, abusado y manipulado a gran parte de la humanidad durante siglos.