Tarjetas de crédito: obstáculos a los que se enfrentan los inmigrantes recién llegados

Normalmente, los inmigrantes recién llegados a otro país perciben que se encuentran en inferioridad de condiciones en numerosos aspectos. En principio las diferencias culturales y lingüísticas resultan una carga muy pesada para la mayoría de los recién llegados. Luego, los abruman todos los aspectos sociales y económicos de vivir en otro país. La necesidad de conseguir o mantener el empleo y acceder a una vivienda adecuada se convierten en una preocupación constante. Muchas personas optan por financiar sus gastos solamente con efectivo, sin plantearse siquiera la posibilidad de administrarse mediante el uso de una tarjeta de crédito. El problema radica en que no es fácil para el inmigrante sobreponerse a todas estas dificultades propias de extranjeros.

Según Howard Dvorkin, CPA y fundador de ConsolidatedCredit.org, los principales obstáculos para obtener tarjetas de crédito son los siguientes:

1. Miedo a las tarjetas de crédito - Es común que las personas que jamás han poseído una tarjeta de crédito sientan miedo. Entonces se preguntan: si nunca tuve una tarjeta de crédito en mi país... ¿por qué habría de tenerla ahora? El caso es que de no tenerla, estarían perdiéndose la oportunidad de realizar transacciones comerciales que de otra manera serían imposibles, además de financiarse de una manera más flexible. Hoy día, este miedo no tiene sentido.
2. Miedo al descontrol financiero - Es el temor a perder el control de los gastos. Esto se soluciona planteando objetivos claros, tales como el llevar un registro de los gastos por escrito, y ateniéndose a las consecuencias si los gastos son demasiados. Crear un presupuesto también es una manera efectiva de manejar las finanzas.
3. Miedo a las deudas de tarjetas de crédito - Que las tarjetas de crédito son sinónimo de deudas que no paran de crecer constituye una creencia muy arraigada. Sin embargo, todo depende del uso que se les adjudique; es innegable que el mismo titular es quien tiene la responsabilidad de administrarla correctamente. Pero lo cierto es que su uso responsable en realidad permite acceder inmediatamente a varios bienes y a poder financiar compras, además de liquidar la deuda en poco tiempo.
4. Miedo a gestionar una tarjeta de crédito - Los inmigrantes suelen imaginar que, por su sola condición de extranjeros residentes en otro país, ninguna institución va a autorizarles la gestión de una tarjeta de crédito. Esto no es así; solo se trata de un mito que no es real. Los bancos ofrecen toda una línea de tarjetas de crédito y seguramente entre ellas encontrarán la apropiada para sus necesidades.
5. Miedo a aprender el idioma inglés - Con respecto a este temor, fundado en la desconfianza ante la firma de un contrato que se encuentra redactado en un idioma parcialmente comprendido, la solución es simple: buscar asesoramiento en alguna de las muchas agencias existentes tal como Consolidated Credit. Lo único que no se debe hacer es aislarse. Como primera medida hay que ingresar al sitio de Internet de las agencias de asesoría e informarse gratuitamente navegando por los numerosos artículos que allí se encuentran. Estos proporcionarán ayuda para tener una visión más profunda que aportará mayor tranquilidad y confianza.

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