Por Lizeth Chacon
Hace trece años mis papás me trajeron a Colorado de Chihuahua, México. Cuando me mude aquí y durante mis estudios en la preparatoria, fui discriminada diariamente simplemente porque era inmigrante y porque tenía un acento muy marcado. Me hacían burla cada vez que trataba hablar inglés, simplemente porque no podía pronunciar las palabras correctamente.
En el momento no me di cuenta que estaba siendo señalada no por algo que hubiera hecho, sino por quién soy. Durante la universidad también me di cuenta que el trato que soporté en una edad tan temprana no era exclusivo a inmigrantes; era algo que muchos otros también enfrentaban cada día. Si quería cambiar mi situación, la situación que los inmigrantes enfrentaban, yo tenía primero que entender a otros, y acoger su lucha como mi propia.
Los problemas que afectan a mi familia y a mí como inmigrantes no serán los mismos que afectan a la comunidad LGBTQ no inmigrante, pero se derivan de la misma ignorancia y odio. Nuestras diferencias nos hacen quienes somos, y esas diferencias son hermosas, pero de alguna manera nos hemos hecho creer unos a otros que esas diferencias son malas. Y yo he visto el impacto en mis amigos quienes son LGBTQ e indocumentados.
He visto el impacto y la fuerza en líderes comunitarios como Isaías, que ha tenido que superar el doble estigma de ser indocumentado y queer/gay. Durante la preparatoria el salió como queer en su clase para hablar en público, después tuvo que salir de un segundo armario como indocumentado. Isaías ahora no tiene miedo y no está dispuesto a "vivir bajo dos sombras". Él es un narrador carismático que es un apasionado por los derechos de los inmigrantes y la justicia LGBTQ y todos los días desde que salió de los dos armarios, él lucha para unir a los dos movimientos.
Recientemente, tomé acción por aquellos/as que viven en las sombras al ayunar por la reforma migratoria. Ayuné junto con otros 50 miembros de la comunidad como parte de la gira de Ayunando por las Familias. Decidí ayunar, rezar, y actuar. Decidí tomar una posición a favor de mi comunidad quien como yo, hemos sido oprimidos y discriminados simplemente por quiénes somos. Decidí tomar una posición ese día, no solo en apoyo a la reforma migratoria pero en apoyo a la humanidad.
Le pido a usted que haga lo mismo, que tome una posición a favor de nuestra comunidad al apoyar y trabajar por un movimiento más unido e inclusivo. Hoy, usted tiene la oportunidad de tomar una posición en apoyo a nuestra comunidad inmigrante, haga una llamada ahorita al Presidente de la Cámara Boehner, y pídale que deje de detener la reforma migratoria y que nos dé un voto (202) 225-0600.
Ha sido un largo viaje pero he progresado entendiendo y siendo más inclusiva, y también lo han hecho mis papás. Hemos tenido conversaciones que han sido un reto pero al mismo tiempo gratificantes. El ser capaz de señalar porque es un error juzgar o insultar a personas solo por quien eligen amar, y el sentirnos cómodos con enfrentar a nuestra cultura y religión nos ha hecho más fuertes. El progreso que mi familia ha hecho refleja ese del movimiento de los derechos de los inmigrantes, hemos tomado grandes pasos no solo en incluir a la comunidad LGBTQ no inmigrante y la comunidad LGBTQ inmigrante en nuestra lucha por la reforma migratoria, pero también en entender cómo se conectan las dos luchas, especialmente para personas que comparten las dos identidades. Después de todo, todos estamos luchando por lo mismo - Igualdad.
Lizeth Chacón.
Organizadora Principal con Derechos Para Todos (RAP)
Derechos Para Todos (RAP) es una organización de base de los derechos de los inmigrantes con sede en Aurora, Colorado, cuya misión es llevar las voces de líderes inmigrantes y sus aliados a la lucha por igualdad, respeto mutuo, y justicia.