Orquesta juvenil busca alejar a niños de la violencia

Ante la pobreza y la violencia pandilleril que aqueja a la pequeña ciudad agrícola de Salinas, California, un programa de música busca cambiar las vidas de cientos de niños.
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Ante la pobreza y la violencia pandilleril que aqueja a la pequeña ciudad agrícola de Salinas, California, un programa de música busca cambiar las vidas de cientos de niños. Desde hace cuatro años, la Orquesta Juvenil de Salinas (o YOSAL por sus siglas en inglés) se propone formar ciudadanos con la autoestima y determinación para superar barreras en su comunidad.

En un concierto reciente al aire libre en la vecina ciudad de Monterey, estudiantes en YOSAL cantan y tocan flautas, claves y xilófonos. Algunos de los niños tienen sólo meses aprendiendo música. Luna Dimas, de 11 años, toca el xilófono como experta.

"La primera vez sentí como si estuviera en otro mundo, y cuando llegué a YOSAL es como si tuviera una segunda familia", dice Dimas.

Crear comunidad y enseñar música para expandir los horizontes son claves para YOSAL. La orquesta utiliza la filosofía de El Sistema, un programa que fue desarrollado en Venezuela. El guitarrista clásico Camilo Ortiz fue el que primero lo empezó a enseñar en Salinas.

"Así como en una comunidad hay un panadero, hay un lechero, hay un policía, cada uno tiene su función. Entonces la función de ellos con un xilófono, con una flauta también es muy importante. Si falta una flauta no va a sonar igual, si falta un xilófono no va a sonar igual. Esa es como una lección de comunidad que ellos empiezan a aprender muy temprano: Tienen que trabajar juntos", dice Ortiz.

A diferencia de la educación de música clásica tradicional, las clases de El Sistema son en grupo y no se enfocan en la teoría, sino en la práctica. Desde el primer día, a los niños les dan instrumentos con los que pueden divertirse y crear música. Luego van avanzando hacia instrumentos más complicados como el chelo y el violín. Luna Dimas y otros estudiantes que van empezando forman parte de la pre-orquesta. Sueñan con graduarse al grupo más avanzado: la orquesta. Luz Ramos, de 11 años, toca la trompeta en la orquesta.

"Cuando miro una canción que todavía no se, digo como voy a resolver esto. No sé, no la conozco. Pero ya cuando la aprendo digo está muy fácil. No puedo creer que yo no sabía", dice Ramos.

Los valores de la música, como la disciplina y la colaboración, le dan a estos niños la confianza y autoestima para enfrentar retos difíciles. Cuando El Sistema fue fundado en Venezuela hace casi 40 años, se convirtió en una especie de revolución social. Amalia Díaz Carrera, la conductora de la orquesta de Salinas, es producto de El Sistema. Ella misma lo estudió desde chiquita en su natal Colombia. Y se convirtió en maestra de violín desde los 14 años.

"La música es una excusa y la música clásica es la perfecta excusa porque rompe la parte de la elite, que la música clásica es para gente de dinero, y además, es la música mas elaborada. Entonces está desarrollando el cerebro de estos niños", dice Díaz.

La maestra dice que El Sistema cambia vidas, y hace que los niños se sientan capaces de ir a la universidad. Yesenia Vega, de 14 años, dice que eso precisamente es lo que le dice su papá. Como muchos de los niños de la orquesta, Vega es hija de un trabajador del campo.

"La música me va a ayudar a agarrar colegios", agrega Vega.

La Orquesta Juvenil de Salinas también quiere desarrollar buenos ciudadanos comprometidos con su comunidad, y generar un beneficio social más grande en Salinas. La ciudad frecuentemente figura entre los lugares con el índice más alto de homicidios por violencia de pandillas en todo California. El maestro Camilo Ortiz dice que en YOSAL, los niños encuentran un sentido de pertenencia muy diferente al de una pandilla.

"Acá no hay manera de terminar mal. Porque ellos están aprendiendo algo muy bueno que los está estimulando, los hace sentir bien porque están creando música, los hace encontrar amigos. Hace que la comunidad los reconozca. Cuando los aplauden, hay veces en que es el único aplauso que han recibido en la vida", dice Ortiz.

Ortiz dice que El Sistema en Salinas será una inversión de largo plazo. Espera que como ha pasado en Venezuela, cuando sus estudiantes crezcan y se conviertan en doctores y abogados, regresen para invertir de nuevo en su comunidad y en el programa.

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