Fotografía significa: "Dibujar con luz". Desde sus inicios con el "Daguerrotipo" (primer cámara de fotos de la historia), hasta hoy, el arte ha evolucionado en ideas, formas y conceptos. Cada fotógrafo, por ser un creativo en si, le ha puesto su toque personal, pero básicamente respetando el material con el que trabajamos, en mi caso con personas: actores, actrices, cantantes, políticos, personalidades públicas.
Hoy pasan por mi mente fotos de grandes maestros como Ansel Adams, creador del sistema zonal (la medición más exacta de la luz), un Helmut Newton, quien dejó un legado dedicado a la moda y con un amplio catálogo de actores, actrices y músicos, fotografiados con su arte particular y en blanco y negro, y un Patrick Demarchelier, fotógrafo emblemático de la revista Vogue en casi todas sus versiones en los cinco continentes.
Adams, Newton y Demarchelier han sido famosos por sus fotos perfectamente definidas y sin uso de Photoshop. Han sido exhibidos y aclamados por todo el mundo como excelentes artistas de la fotografía. Ellos no necesitaron del uso y hasta abuso de una herramienta de diseño gráfico llamada "Photoshop", que como una aspirina parece que lo curase todo dentro del arte fotográfico.
Lejos de lo que el público cree, los fotógrafos que hacemos moda o trabajamos con celebridades, no somos partidarios del uso de esa herramienta, que convierte en plástico y casi siempre irreal cualquier imagen, generalmente alterando valores, colores y a veces "borrando" manos, pelo, zapatos, haciendo de una gran foto, el papelón del siglo.
Viendo una fotos de Eve Arnold tomadas a Marilyn Monroe o las de Lawrence Schiller, quien la fotografió desnuda en 1962, meses antes de morir, puedo apreciar la sutileza de la foto bien lograda a base de luz natural, utilizando grandes ventanales, un solo punto de luz, sin retoque alguno, pues no existía el Photoshop. Eso era puro oficio, cámaras de medio formato, film blanco y negro, sólo trabajando la luz. Era arte e inspiración.
Muchas veces, cuando termino una sesión de fotos, el talento al que estoy fotografiando me dice: "¿Tú me haces unos retoquecitos verdad? ¿me das una ayudadita cierto?"... Si supieran que eso es como una puñalada en el corazón creativo, pierdes casi dos horas para 'ayudar' malas posturas, lo que creen que son imperfecciones y que en realidad son inseguridades.
Cada celebridad que he fotografiado tiene una belleza particular, diferente. Y esa particularidad es lo que los hace brillar, que estén donde están aprovechando sus defectos y virtudes, mostrando ambos a través de su arte.
Si Marilyn Monroe viviese estoy seguro que no usaría el "Photoshop" se sentiría insultada de que alguien propusiera quitarle su lunar, le adelgazara sus piernas perfectas o le levantaran los senos con una herramienta de diseño, pues se hubiera perdido de ser lo que será eternamente: la gran diva de todos los tiempos.
AQUÍ ALGUNOS DE MIS TRABAJOS:
