Los niños y el peligro de los medios de comunicación

Muchos estudios demuestran que nuestros niños COPIAN y APRENDEN la conducta agresiva, violenta de lo que ven.
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No es la primera vez que escribo sobre cuánto me preocupan los niños que están creciendo expuestos a los medios de comunicación de estos tiempos, sobre todo al cine, los videojuegos y la TV. Muchos estudios demuestran que nuestros niños COPIAN y APRENDEN la conducta agresiva, violenta de lo que ven.

Sin embargo, por años los hemos "cuidado" de ver TV o cine con contenido sexual, cuando las escenas de sexo no son nada malo en una familia que puede contestar las preguntas que sobre ellas hagan los niños, con naturalidad o aceptando que no tienen respuesta en ese momento, y que se les contestará después. Siempre que la busque y de verdad le aclare las dudas después, no tiene que afectar sexualmente a nuestros hijos. Ver el sexo con naturalidad es lo más importante y lo primero que debemos hacer, para educar sexualmente.

Por otro lado, ignoramos olímpicamente la exposición de nuestros hijos a la agresividad y mensajes que afectarán su formación, su futuro. La conducta violenta y agresiva exhibida en los cines y muñequitos en los primeros 7 años de los niños, es fatal.

Esa conducta se aprende, se repite, y se sigue recibiendo como respuesta una "sordera selectiva" sumamente preocupante. Si creen que exagero, piensen en el caos de las escuelas y las matanzas realizadas por estudiantes hasta con armas de fuego, la pérdida de valores, la corrupción, y un gran etcétera.

Regresando de un viaje a Europa, en un vuelo donde por lo menos pude ver películas, ya que en la ida ni eso había, otra de las barbaridades que estamos viviendo en el mundo actual, abuso, falta de servicio y un gran desastre. Quise ver "Maléfica" basada en la "Bella Durmiente".

Ojalá no hayan llevado a sus hijos a verla, y si pueden impidan que la vean. Los cuentos de hadas tienen su razón de ser y por eso son clásicos. Ayudan a los niños a manejar conflictos inconscientes con los que se enfrentan cada día, como el odio-amor a mamá, que les causa mucha culpa y por esos cuentos sí pueden odiar a las madrastras y dejan salir su rabia, rechazo y odio, sin conflicto.

O sea, las madrastras representan simbólicamente a la parte "mala" de la madre. Estoy segura que quien escribió el guión no sabía eso o no lo hubiera hecho, si es que tiene hijos. Pero lo peor es que cuando termina la película dicen algo como esto:

"Como ven la historia no era como se la habían contado, aquella que llamaban la BELLA DURMIENTE... Al final mi mundo no lo unió un HÉROE O UN VILLANO, como había predicho la leyenda, sino alguien que era TANTO HÉROE COMO VILLANO Y SU NOMBRE ERA MALÉFICA".

Quiero aclarar que la película está muy bien hecha, muy bien actuada, los efectos especiales son fabulosos y mantuvo mi interés todo el tiempo, el problema es el final por lo que no debe ser APTA PARA MENORES, y basado en un clásico cuento infantil, estoy segura que MUCHOS NIÑOS LA VIERON Y LA VERÁN.

En los primeros años los niños forman casi la totalidad de lo que serán sus conceptos más importantes, su idea sobre el amor, el mundo, lo bueno, lo malo... y es cuando más aprenden. Solo recuerde que en esos primeros años los niños aprenden a hablar, aprenden a caminar, interiorizar valores, principios, etc. No olviden que los niños tienen un mundo mágico, simbólico y que la capacidad de pensar como adultos apenas comienza a desarrollarse a los 7 años.

Un niño no puede entender, más bien esto lo confunde, cuando le dicen que un "ídolo" o un "HÉROE" es también un "VILLANO"... Eso nos cuesta mucho a los adultos entenderlo, y algunos nunca aceptan ni comprenden que mucha gente puede, por buena que sea, hacer algo terrible.

Con esto no me parece difícil que nuestros políticos, nuestros sacerdotes, nuestros maestros, nuestros deportistas, en fin, "los que deben ser nuestros héroes", son cada día peores: corruptos, abusadores de menores, sin valores ni principios.

Esto me recuerda la conversación que tuve con unos niños en casa de sus padres, ellos planteaban que para tener dinero había que meterse a la política. Desde pequeños ya estaban obsesionados con el TENER en lugar del SER. Como bien dice mi libro preferido, "El Principito", "LO ESENCIAL ES INVISIBLE A LOS OJOS".

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