Todo llega... Para quien sabe esperar

El otro día, un colega me contaba sus desventuras en su trabajo. "No me valoran", "no me dejan viajar", "son los jefes y no saben nada"... Tenía razón en todo, al menos desde su perspectiva...
This post was published on the now-closed HuffPost Contributor platform. Contributors control their own work and posted freely to our site. If you need to flag this entry as abusive, send us an email.

El otro día, un colega me contaba sus desventuras en su trabajo. "No me valoran", "no me dejan viajar", "son los jefes y no saben nada"... Tenía razón en todo, al menos desde su perspectiva, pero la realidad es que en muy pocos lugares te dan el lugar, la oportunidad o el puesto que mereces... o que crees que mereces. Y es que todo depende del cristal con que se mire. Estaba verdaderamente frustrado pese tener lo que muchos considerarían "un buen empleo" "ganando un muy buen sueldo".

"No puedo renunciar, pero me siento infeliz", me dijo mientras saboreábamos una taza de café.

"¿Qué harías tú?", me preguntó. "¿Yoooo? Aprovecharía las pocas oportunidades que me dieran, y no me mortificaría por nada. Si no me mandan de viaje, mejor, me pagan lo mismo viajando que no. ¿No me dan las grandes asignaciones? No importa, me luzco con las pequeñas. ¿Mis jefes no me consideran lo suficientemente buena? Allá ellos, es solo su percepción. Ya aprendí mi lección.

Estuve en una gran empresa y aunque en mi revisión de desempeño anual me daban altas calificaciones, cuando tuvieron que despedirme por cuestiones financieras, lo hicieron sin problemas. Además, lo que hiciste ayer ya se olvidó... todos los días hay que renovarse". Intenté convencerlo, pero, no lo logré.

A veces nos cuesta mucho trabajo entender que no todos podemos ser jefes, ni viajar, ni tener ese ascenso tan deseado. Tampoco podemos tener al novio perfecto o al marido que nos saque de pobres. Así es la vida: injusta y terriblemente cruel.

Además, seamos honestos... ¿qué ofrecemos nosotros a cambio? ¿Estamos realmente preparados para esas nuevas oportunidades? ¿Realmente somos mejores que otros? Habría que cuestionarnos a conciencia.

Me parece excelente la idea de prosperar y de luchar por conseguir lo que se quiere, pero con lógica y sobre todo, paciencia... mucha paciencia. A algunos las cosas les salen rápido, a otros les toma más. Soy de las que cree firmemente en que a veces hay que hacer pausas.

Durante muchos años viví como un caballo de carreras desbocándome en casi todos los aspectos de mi vida, y terminé verdaderamente exhausta. Paciencia. Todo a su tiempo, las cosas van a suceder si son para ti y si forman parte del universo de tu existencia. Como dijo el hijo de un famoso personaje que se acaba de escapar por un túnel en el momento menos pensando haciendo lo inimaginable... "Todo llega, para quien sabe esperar".

Popular in the Community

Close

What's Hot