7 hábitos que te detienen para alcanzar metas

"Otro año que ya se va y no lograste ni la mitad de lo que deseabas, otra vez en el punto de partida, iniciando un año con los mismos propósitos que tenías hace 12 meses...".
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El 2013 ya casi nos deja y en medio de los regalos, de las visitas familiares, de la cenas con amigos y de las deliciosas comidas, muchos están enfrentando una vocecita que les susurra: "otro año que ya se va y no lograste ni la mitad de lo que deseabas, otra vez en el punto de partida, iniciando un año con los mismos propósitos que tenías hace 12 meses". O bien, quizás aunque se esforzaron, las cosas no salieron como lo esperaban. Algunos porque no pasaron del decir al hacer, otros porque quizás no tienen claro qué es lo que realmente desean, otros porque decidieron abandonar el camino, en fin, todo sucede por algo. Lo bueno es que tenemos tiempo de planear y antes de decirte cómo lograr realizar tus sueños, que lo haré en una columna muy pronto, sentí interesante compartirte algunos de los malos hábitos que tenemos los seres humanos que no contribuyen a la materialización de nuestros proyectos.

Pedro Sifontes, Coach de Liderazgo Creativo señala varios hábitos que debemos considerar, identificar y evitar para poder salir adelante. Estos son:

- El no tener prioridades claras. El aprender a gestionar nuestra vida nos ayudará a organizar mejor nuestro tiempo. Los mejores líderes son los que han aprendido a establecer prioridades. ¿Estás invirtiendo tu tiempo sabiamente?

- Prometer más de lo que puedo cumplir. Muchas veces como líderes hacemos promesas con tal de complacer al jefe o al equipo, y después quedamos mal. Subestimamos el tiempo o presumimos del futuro. ¿Estás cumpliendo tus promesas?

- Expectativas poco realistas. No se pueden obtener buenos resultados en el trabajo cuando no se tiene bien claro lo que realmente esperamos de las personas que laboran con nosotros. ¿He clarificado las expectativas que tengo de cada colaborador?

- Ser de doble ánimo. Hay líderes que un día son una maravilla y al siguiente día dejan de serlo, parece que se levantaron del lado equivocado de la cama. Esa inconsistencia hace que muchos no quieran trabajar con él o ella. ¿Soy de doble ánimo?

- Tener oídos sordos. Aquellos que hablan pero nunca escuchan, ni siquiera a ellos mismos en lo que están diciendo. ¿Estoy escuchando a otros? ¿Me estoy escuchando al hablar?

- Decir sí cuando debe decir no. Hay líderes que buscan popularidad que dicen si a todas las cosas cuando en realidad no quieren. Esto es producto de la inseguridad del mismo. ¿Tengo el coraje de decir no cuando se necesita?

- Tener favoritos. No es malo tener favoritos, lo malo es estar de acuerdo siempre con ellos. Hay que tener cuidado de no caer una codependencia. Ser un líder de éxito requiere vivir en interdependencia. ¿Tengo favoritos?

Los anteriores puntos no tienen como objetivo señalarte, todo lo contrario, la idea es que reconozcas los que hay en ti y sepas que es eso lo que puede estarte deteniendo en el camino hacia la realización de tus sueños y trabajes esas debilidades para liberarte, soltarte y avanzar al ritmo y hacia la meta que tienes.

Como bien dijo Albert Einstein: "si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo."

Y recuerda: ¡Sonríe, agradece y abraza tu vida!

Sobre todo: ¡a despertar a la vida, gente! Para VIVIR.

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