"Controla tus emociones para que ellas no te controlen a ti"

A veces parece que ellas te dominaran a ti, y no al revés, así son las emociones, capaces de cambiar tanto nuestra forma de ser, de vivir, de actuar y de conseguir nuestras metas.
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A veces parece que ellas te dominaran a ti, y no al revés, así son las emociones, capaces de cambiar tanto nuestra forma de ser, de vivir, de actuar y de conseguir nuestras metas. Lo bueno es que las podemos y debemos controlar. Así como lo lees, aunque la gran mayoría de personas asumen que las emociones están fuera de nuestro control y que simplemente son reacciones a los acontecimientos y situaciones que la vida nos pone en el camino, resulta que sí podemos controlarlas y hasta escuchar el mensaje que tienen para usarlo a nuestro favor. Sobre todo a esas emociones que sabemos que no son más positivas que existen.

Anthony Robbins, en su libro --qué digo libro, biblia del desarrollo y crecimiento personal-- "Despertando al gigante interior", brinda 6 pasos para el dominio emocional, que a continuación resumo:

El primero es identificar lo que está sintiendo realmente: ¿qué estoy sintiendo realmente? Por ejemplo:¿me siento enojado o herido? El simple hecho de tomarse el tiempo para identificar lo que siente, ayuda a disminuir la intensidad emocional que se experimenta. El segundo paso es reconocer y apreciar sus emociones, sabiendo que éstas le apoyan. Esto se logra cultivando la sensación de aprecio por todo lo que sentimos, comprendiendo que aunque no entendamos lo que está sucediendo, todo en la vida nos aporta. Lo que nos lleva de inmediato al tercer paso del dominio emocional, que es tener la curiosidad por el mensaje que nos ofrece la emoción: ¿qué puedo aprender de esto?, ¿qué estoy dispuesto a hacer para encontrar una solución ahora mismo?, ¿qué es lo que deseo sentir realmente?, son algunas de las preguntas que debe hacerse.

El cuarto paso es obtener confianza en sí mismo: recuerde cómo logró manejar una esa emoción cuando ya la experimentó anteriormente, ¿qué hizo en aquella ocasión? Emprenda lo mismo que le dio la solución en ese momento teniendo la plena confianza de que volverá a funcionar y esta vez será más rápido, pues ya tiene el conocimiento necesario para atravesarla adecuadamente.

El quinto paso es asegurarse de que puede manejar la emoción no solo en esta ocasión sino en el futuro, en caso de que vuelva a suceder. Y el último y sexto paso, se trata de animarse y emprender la acción poniendo en práctica todo los anteriores pasos.

Robbins reconoce y enumera 10 emociones negativas fundamentales que la mayoría de las personas tratan de evitar, pero que si les prestamos atención y comprendemos qué significan, pueden ser utilizadas para impulsarnos a emprender la acción...

Incomodidad

Las emociones de incomodidad aún no siendo muy intensas son molestas y nos crean la angustiosa sensación de que las cosas no van bien. El aburrimiento, la impaciencia, la inquietud, la tensión o una leve sensación de desconcierto te transmiten el mensaje de que algo no está bien del todo. Bien porque no acabes de percibir del todo las cosas o porque las acciones que estás llevando a cabo no producen los resultados que deseas.

La acción necesaria acá es afrontar las emociones, cambiar tu estado ánimo, clarificar lo que deseas, redefinir tus acciones. Prueba una actitud ligeramente diferente y observa si puedes cambiar inmediatamente la forma en que sientes la situación o incluso cambiar la calidad de los resultados que estás produciendo. Los sentimientos de incomodidad se intensificarán si no los afrontas.

Temor

Incluye desde pequeñas preocupaciones y recelos hasta niveles intensos de preocupación, ansiedad e incluso terror. El temor suele ser la anticipación de algo que no tardará en ocurrir y para lo que tenemos que prepararnos, bien para afrontar la situación o para hacer algo para cambiarla. El problema consiste en que la mayoría de las personas o bien niegan su temor o bien se dejan arrastrar por él.

Para ello, revisa aquello por lo que te sentías temeroso y piensa lo que tienes que hacer para prepararte mentalmente. Imagina qué acciones necesitas emprender para afrontar la situación de la mejor manera posible. Es posible que ya hayas llevado a cabo todo lo que estaba en tu mano, y aún así sigas sintiendo temor; este es el momento para utilizar el antídoto contra el temor: tomar la decisión de tener fe, sabiendo que ya has hecho todo lo que podías para afrontar lo que estás temiendo.

Herida

Una de las emociones que parece dominar las relaciones humanas, tanto personales como profesionales, es la emoción de sentirse herido. La herida suele venir de una expectativa que no se ha cumplido. Esa sensación de pérdida es lo que crea la sensación de sentirse herido.

Lo importante es darse cuenta de que es muy posible que no haya perdido nada. Vuelve a evaluar la situación, es posible que esa persona no se haya dado cuenta del impacto de sus acciones en tu vida, o es posible que tú mismo estés juzgando la situación demasiado pronto o con demasiada dureza. Prueba a comunicarle a dicha persona, de una forma elegante y apropiada, tu sensación de pérdida. Es muy posible que el simple hecho de comunicarlo disminuya o elimine dicha sensación. Si no comunicas tu sentimiento de sentirte herido es muy probable que se transforme en:

Enfado

Incluye todas las emociones que van desde sentirse suavemente irritado hasta el cabreo más grande. Te está indicando que alguna persona (o tú mismo) ha violado una regla o criterio importante en tu vida. Debes darte cuenta de que puedes haber interpretado mal la situación, que es posible que la otra persona no sepa lo importante que es para ti esa regla o criterio. Pensar que, aunque una persona rompa uno de tus criterios, tus reglas no son necesariamente las "correctas" aunque tú creas que sí. Plantéate preguntas capacitadoras, por ejemplo: "¿Es cierto que le importo a esta persona?", "¿Qué puedo aprender de esto?", "¿Cómo puedo comunicar la importancia que tienen para mí estos criterios y hacérselo saber a esta persona para que me ayude?"

Frustración

Solemos sentirnos frustrados cuando nos sentimos rodeados por obstáculos en nuestra vida, o que hacemos continuos esfuerzos por obtener las recompensas que esperamos. Significa que tu cerebro está convencido de que podría hacer las cosas mejor de lo que las está haciendo ahora. La frustración es una señal muy positiva porque significa que la solución a tu problema se encuentra a tu alcance, pero que lo que estás haciendo en la actualidad no funciona, por lo que necesitas cambiar tu actitud para alcanzar el objetivo. Tienes que ser más flexible.

Desilusión

Puede ser una emoción muy destructiva si no se le hace frente con rapidez. Sueles sentirte como "desinflado", surge a menudo como resultado de esperar más de lo que se consigue. Te indica que probablemente no va a producirse una de las expectativas (u objetivos) que tenías. Por lo que ha llegado el momento de cambiar tus expectativas y hacerlas más apropiadas a la situación. Las cosas por las que te sientes desilusionado suelen ser desafíos temporales. Puede que este sea un "tiempo de espera". Si has plantado una semilla hoy mismo no puedes esperar que mañana ya haya crecido el árbol. Vuelve a evaluar por competo lo que deseas realmente y empieza a desarrollar un método más efectivo para conseguirlo.

Culpa

Las emociones de culpa, lamentación y remordimiento son las que los seres humanos suelen evitar más en la vida, y en esto radica precisamente el valor del mensaje que nos transmiten. Son emociones dolorosas pero cumplen una función muy valiosa. La sensación de culpa te dice que has violado uno de tus propios criterios y que tienes que hacer algo para asegurarte de no volver a violar ese criterio en el futuro.

Inadecuación

Cada vez que tenemos la sensación de no poder hacer algo que deberíamos ser capaces de hacer aparece el sentimiento de "no ser digno de". Es una señal de que necesitas más información, comprensión, estrategias, herramientas o confianza en ti mismo.

Sobrecargado/abrumado

Te sientes abrumado porque estás tratando de afrontar demasiadas cosas al mismo tiempo, o porque intentas cambiarlo todo de la noche a la mañana; la sensación de impotencia perturba y destruye más la vida de la persona que cualquier otra cosa. Tienes que desarrollar inmediatamente una sensación de control sobre tu propia vida: Decide cuál de todas las cosas que afrontas en tu vida son las prioritarias. Anota todas las cosas que son importantes conseguir para ti y colócalas por orden de importancia.

Soledad

El mensaje es muy claro, necesitamos relacionarnos más con la gente. Debes darte cuenta de que puedes salir y establecer una relación inmediatamente. En todas partes hay personas solícitas para con los demás.

Identifica el tipo de relación que necesitas. ¿Una relación íntima? ¿Una buena amistad? ¿Alguien que te escuche? ¿Una persona con quien hablar y reír? Tienes que identificar tus verdaderas necesidades.

Por último y teniendo claro cuales son las emociones negativas que debemos evitar y cómo hacerlo, te comparto las diez emociones que nos empoderan, que debemos sembrar en nuestras vidas para cosechar los frutos que deseamos. Estas son las emociones que debes concentrarte en sentir y evitar todas las anteriormente mencionadas:

1.Amor y calidez: el amor todo lo vence, si alguien se acerca con enfado y usted le responde con amor, el estado de ánimo de esa persona terminará por cambiar.

2.Aprecio y gratitud: empiece, si no lo ha hecho, a apreciar, valorar, agradecer todo lo que la vida, la gente y la experiencia le han ofrecido. Viva una vida con gratitud.

3.Curiosidad: si quiere crecer en la vida, aprenda a ser tan curioso como un niño, evitará el aburrimiento y siempre tendrá energía.

4.Excitación y pasión: Robbins asegura que la pasión puede transformar cualquier desafío en una tremenda oportunidad. NO se limite a pensar, lleve a cabo todo lo que debe hacer para obtener lo que desea.

5.Determinación: es la diferencia entre quedarse en decir y emprender la acción con compromiso.

6.Flexibilidad: la habilidad para cambiar su actitud. Elegir ser más flexible, significa elegir ser feliz.

7.Confianza en sí mismo: es la sensación de certidumbre que todos deseamos y solo logramos por medio de la fe.

8.Alegría: no significa que la vida será rosa, pero sí que usted, pase lo que pase, afrontará con actitud lo que suceda.

9.Vitalidad: que el cuerpo, que es nuestro traje y el cual sufre las consecuencias de lo que usted siente, esté en estado saludable, óptimo, gracias al ejercicio, pensamientos positivos y una alimentación adecuada.

10.Contribución: permítase darse a sí mismo y a los demás.

Espero que este breve resumen le ayude a mejorar sus emociones y elija sembrar en su mente y cultivar las que más le convienen y le llevan por el camino adecuado para tener una vida más plena y lograr sus metas.

Y recuerda: ¡Sonríe, agradece y abraza tu vida!

Sobre todo: ¡a despertar a la vida, gente! Para VIVIR.

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