6 pasos para que no te desesperes mientras llega lo que deseas

6 pasos para que no te desesperes mientras llega lo que deseas
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Hace unos días me tocó vivir algo que siempre había escuchado en boca de los demás. Siempre escuché a algunas personas decir "estoy que no me la creo", cuando les sucede algo bueno, logran una mayor posición laboral, concretan un negocio, un proyecto, logran bajar de peso, salen de una enfermedad, en fin, algo que jamás creyeron posible, ocurre. Quizás hasta ya habían perdido la ilusión, pero llega.

Durante más de casi 10 años había vivido frustrado, triste, enojado, comparándome y por lo tanto enfurecido, de ver que todos lograban sus metas y que yo no estaba logrando lo que anhelaba. Todas las personas que tomaban coaching con un servidor me decían que era genial, porque lograban todo lo que se proponían. Eran, ellos, sus capacidades, su fe y el impulso que tomaban en sesión. Sin embargo, a mí me estaba pasando como dice el refrán, "casa de herrero, cuchillo de palo", es decir, el que menos lograba avanzar con sus cosas era yo. Y créame, eso era frustrante.

Tenía fe y no la tenía. Intenté abrir muchas puertas y nada. En los últimos seis meses del año pasado pasé la más grande crisis que haya tenido, me hundí en un tremendo hueco donde no veía más que negro. Sin embargo, a como pude, tomé valor para buscar ayuda. Sentía que me estaba volviendo loco al no encontrar la solución, al tener tantas herramientas, y que no podía hacer que funcionaran en mí tan bien como en los demás.

Empecé varios procesos de desentoxicación emocional, por decirlo así, muy fuertes. Saqué tanta basura y me vi forzado a sanar tantas cosas que hasta físicamente me desgasté. Caí en el hospital y todo. Me estaba vaciando, porque definitivamente con tanta mierda emocional, no podía recibir.

Luego de ese proceso comencé a experimentar la paz, tranquilidad y sobre todo a tener claro que lo que está para mí, nadie ni nada me lo va a quitar, porque Dios es más grande que cualquier situación. Entonces empecé a confiar, a saber que todo llegará. Me puse en manos de Dios, el universo, la fuente, la vida, como usted lo quiera llamar, y la angustia se fue de mi vida. Los primero días fueron súper raros, pues yo estaba acostumbrado a estar mal para sentirme normal y ahora estar bien, era como raro. Y todo empezó a fluir, desde lo más mínimo hasta que se ha abierto una puerta que sé es el primer gran paso hacia la cima de lo que deseo.

Si algo he aprendido es que solamente porque no haya pasado no quiere decir que eso no va pasar, hay que mantenerse alerta, constante, perseverante, paciente en la espera de eso que deseamos va a suceder, para así avanzar sin desfallecer y disfrutar el proceso. No puedo decir que llegó tarde, simplemente éste era el momento, 10 años después de los que yo he asumido año tras año que debía suceder.

Por eso hoy escribo sobre esto, porque 10 años para mí fue mucho y ahora que ha sucedido no son nada y porque quiero que entiendas esto: lo que tú has empezado en tu vida lo vas a ver terminado, eso es una ley para muchas personas que se pierden en el proceso de la fe, de la confianza, del esfuerzo, de la seguridad, de dar una milla extra y entonces es tan solo eso lo retrasa el proceso de recibir las bendiciones que la vida tiene para uno.

Todo llega, todo se solucionará, todo lo superarás, todo pasará. Siempre ha sucedido. Quizás deseas mejorar en tu economía, un mejor trabajo, superar una enfermedad, tener un hijo, bajar de peso, tener una pareja, lo que sea; sigue creyendo, sigue esperando y recibirás.

He pensado en algunos pasos, que yo tuve que ir dando y aprendiendo y que debes dar para que no desesperes mientras llega lo que deseas. A continuación te los comparto.

1. Sana lo que tengas que sanar. Para recibir lo que la vida tiene para usted, tiene que vaciarse de todo lo que le ha estado acumulando negativamente en su ser y con eso me refiero a orgullo, resentimientos, ego, frustraciones, miedos y demás. Si usted no saca todo eso y no sana las heridas que tiene y que acumula consigo mismo, con personas que conoce, con familia, con amigos, compañeros de trabajo o estudio, con alguien que estuvo en una relación de pareja no va poder tener espacio para recibir todo lo que usted desea. Entonces, lo primero que tiene que hacer es buscar algún método, alguna terapia, algún taller, un seminario, que le ayude a enfrentarse con todos esos pequeños pero grandes monstruos que le están obstaculizando su camino. Eso fue lo primero que yo hice, tuve que enfrentarme con muchas cosas y fue un proceso que me desgastó incluso físicamente y me mandó al médico pues fue muy fuerte, porque cuando estamos hablando del tema emocional son cosas que cargamos por muchos años, pero si no nos deshacemos de todo eso, no vamos a tener el espacio para poder recibir lo que merecemos.

2. Cuida tus palabas y tus pensamientos. Esto es básico y cuesta. Nadie dice que es fácil. Sin embargo, cuando lo logras, es como desatarte de la sombra del diablo. Las palabras tienen el poder de crear, necesitas revisar muy bien qué es lo que estás diciendo y pensando. Si te enfocas en que no puedes, definitivamente no podrás. Si te enfocas en que puede, en que vas a salir adelante, en que lo vas a lograr, en que vas a superar lo que estés teniendo que superar, ten por seguro que eso es lo que va a suceder. Declara cosas como "Éste es mi año para bajar de peso, éste es mi año para el nuevo trabajo, mis ingresos superan mis gastos". Decreta todo lo bueno que deseas con tu boca. Deja de decir, "esto nunca va a cambiar, no tengo suerte, mi vida es fatal, la pobreza es lo mío". Pega papelitos con declaraciones positivas y sobre lo que deseas en tu baño, en la cocina en donde quieras, porque así será más fácil recordárselo a tu subconsciente.

3. Lo que deseas imagínalo como si ya lo tuvieras. Imagina cómo te vas a sentir cuando tengas eso que deseas, cuando hayas superado lo que tienes que superar, cuando hayas logrado eso por lo que tanto has trabajado. Puede ser que te estés enfocando en pensar en por qué no sucedido o en pensar en que eso ya no es posible, pero lo que no nos tiene que interesar es cómo va suceder, sino empezar a imaginarlo, a tener la certeza de que sucederá, a vivirlo, a sentirlo como si ya lo tuvieras. ¡Cree que eso ya está para ti!

4. Deja de enfocarte en el pasado de la manera negativa, que lo que hace es desgastarte o quitarte energía. No te quedes atrapado por el lado del pasado, limpia los zapatos y sal adelante. En el tiempo perfecto, en el momento perfecto, todo llegará.

5. En vez de estar enojado, frustrado, deprimido, decepcionado, triste, porque las cosas no han salido como tú crees que debieron hacer salido hace meses, semanas o años, da una milla extra, cree, suelta y disfruta el proceso porque lo que está para ti viene si tú decides ir por ir por ello, ser valiente y ser paciente. Créeme que lo vas a ver pero, tienes que cambiar de actitud de negativo a positivo. No digo que te vuelvas idealista, sé realista, pero dentro de una realidad en fe. ¿Qué estás creyendo? ¿A qué le estás dando más importancia en tu vida: al "pobre de mí, esto nunca sucederá", o a "esto también va a pasar, yo puedo y lo haré"?

6. Muchas personas actualmente entrenan tanto como en el gimnasio, el deporte de la queja. Son abanderados. Agradece y agradece por adelantado. Agradece por ese aumento en tu economía, por ese hijo que tanto deseas, porque esa situación de enfermedad que tienes ya fue superada, porque obtienes el trabajo que siempre quisiste, porque el carro que deseas llega a tu garaje, por esa esperada pareja, porque lo que deseas llega a tu vida, agradécelo incluso si todavía no lo tienes.

Usted no ha visto nada, créame, pero debe tener fe.

Dele tiempo al tiempo, todo llega en su momento. Recuerde que cada nuevo día llega un nuevo comienzo. Cada nuevo día todo es posible otra vez. Vive un día a la vez. Disfrute el proceso que lo que usted desea llegará y sino la vida le sorprenderá con algo mucho más grande de lo que usted imaginó.

Y recuerda: ¡a sonreír, agradecer y abrazar tu vida!

¡Gracias por existir, compartir y estar!

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