En este año electoral en varios países, incluyendo el nuestro, es bueno analizar a los políticos y sus políticas...
Una vez leí que el político poda las ramas de su vida, porque no quiere tener nada que ver con sus raíces, y lo que ocurre en los Estados Unidos y otros países así lo corroboran.
La política ha existido siempre, los políticos han existido siempre, pero ¿qué ha sucedido?, desde los faraones, reyes y emperadores hasta hoy, el mundo sigue siendo el mismo carrusel de desgracias, de hecho, el sufrimiento se ha multiplicado cada día. Todos los políticos han demostrado ser ineptos; algunos con buenas intenciones, pero las intenciones no cuentan en absoluto, los resultados son los mismos.
Debemos reconocer que los políticos son seres humanos igual que nosotros, y por supuesto al igual que nosotros está tratando de evitar sus propios problemas internos, en lugar de resolverlos, y para ellos el modo más fácil de escapar de ellos mismos es ocuparse de los problemas del mundo.
La economía, la política, la historia, la reforma, todas estas son estrategias para escapar de los propios problemas, estrategias sutiles, peligrosas, porque se creen que están haciendo algo grande, cuando realmente están siendo cobardes.
El verdadero valiente, primero encara sus propios problemas, los enfrenta, tratando de transformar su ser, porque solo una persona transformada puede provocar el proceso de transformación en los demás.
Según Osho "hay tres formas de perderse en este mundo, la primera es el sexo, la segunda es el juego y la tercera es la política". El sexo es la más divertida, el juego es la más excitante y la política es la más efectiva, porque en el sexo el poder es compartido y esto es placentero, en el juego el poder es del azar y la persona se excita creyendo que lo vencerá y en la política el poder es propio, porque el político adquiere poder y el poder absoluto es más divertido y excitante que el sexo y el juego.
Los políticos han estado dirigiendo el mundo con regímenes llamados socialismo, comunismo, capitalismo, y otros "ismos", desde hace siglos, cinco mil años de política o más, pero este juego político a donde nos llevó ¿qué ha ocurrido?. El hombre sigue estando en la misma oscuridad, en el mismo sufrimiento, en el mismo infierno, antes los discursos políticos daban esperanzas de un mundo mejor, esperanzas de un mañana, que nunca llego, los mismos discursos que ahora nadie cree.
Así como la religión nos da una respuesta y una esperanza espiritual sobre que nos sucederá después de la muerte, la política debiera darnos soluciones reales sobre lo que nos sucede en la vida.
Hasta la próxima.