Este miércoles 3 de octubre parecía que transmitían desde un hotel en Las Vegas y no desde una Universidad en Denver, porque así como dos boxeadores en el ring, los dos candidatos a ocupar el salón Oval en 2013, en este primer debate, se estudiaron, esquivaron, corrieron y pegaron, de acuerdo al tema y momento tratado.
Mitt Romney entró al "cuadrilátero" más agresivo, tomó la pelea con más ventaja y con un sólido desempeño frente al presidente Barack Obama, quien se defendía como si fuera el retador y no el dueño del título.
Indudablemente el Republicano estaba mejor preparado, concentrándose en el débil crecimiento económico y el alto desempleo, tomando desprotegido y vulnerable a Obama, quien ni siquiera supo sostenes la supuesta creación de empleo, perdiendo puntos incluso con temas como los impuestos, la salud y el papel del gobierno.
"El presidente tiene una visión muy similar a la que tenía cuando se postuló para el cargo hace cuatro años y está demostrado que esa no es la respuesta correcta para Estados Unidos ", dijo Romney al comenzar.
Me sorprendió que Barak Obama no mencionara los temas que ha utilizado en los anuncios, como el sonado '47 por ciento', el caso de Bain Capital y la inmigración.
Incluso vi un Presidente nervioso que debatió con el moderador:
"Yo tenía cinco segundos antes de que me interrumpiera," dijo Obama a Lehrer con una sonrisa.
En un momento pensé que Romney trataría de "mentiroso" a Obama, porque en dos casos le dijo: "Prácticamente todo lo que dijo sobre mi plan de impuestos es incorrecto", pero se cuido mucho de no extralimitarse. La única defensa al ataque de Romney contra el plan de salud u 'Obamacare', como lo llamó Romney, fue un débil:
"Mi plan de salud se puso en marcha después que Usted puso en marcha el suyo, muy parecido, como gobernador de Massachusetts y no ha destruido puestos de trabajo allí, así que no debería perderlos a nivel nacional".
Romney pega, Obama habla
No hay duda que Romney fue con más energía y que atacó repetidamente a Obama en temas como la reforma de salud y el aumento de los impuestos, mientras que Obama intentaba largas explicaciones sin centrarse en lo que su oponente estaba diciendo, incluso el moderador Jim Lehrer intentó, sin éxito, mantener al Presidente dentro de los límites de tiempo para las respuestas, pero en los totales, Barak Obama tomo cuatro minutos más que Mitt Romney.
Incluso Romney se dio el lujo de criticar la mala inversión de Obama en fuentes alternativas de energía, cuando señaló los 90 mil millones de dólares gastados en programas y políticas para el desarrollo de fuentes alternativas de energía que fracasaron y podrían haberse dedicado a la contratación de profesores u otras necesidades para descender el desempleo.
Cuando Romney se negó a divulgar detalles sobre sus planes fiscales, nuevo plan de salud y la ley de reforma de Wall Street, el presidente Obama se limitó a decir:
"En algún momento, el pueblo estadounidense tiene que preguntarse cual es la razón del gobernador Romney para mantener sus planes en secreto, serán tan buenos".
El gancho de Romney a la mandíbula de Obama fue cuando se refirió a los millones que viven gracias a las estampillas de comida, o los millones que forman las filas del desempleo en los últimos cuatro años, comparando los problemas de España en la actualidad con lo que le espera a los Estados Unidos si Obama conserva la presidencia.
"Sabemos que el camino que estamos tomando no está funcionando. Es hora de un nuevo camino ", dijo Romney al terminar.
Ahora debemos esperar el 11 de octubre, para ver el debate de los vicepresidentes, Joe Biden y Paul Ryan, en Kentucky.
Los otros debates presidenciales tendrán lugar el 16 de octubre en Nueva York y 22 de octubre en Florida.
El debate en fotos en HuffPost Voces:
Primer debate presidencial: Obama vs. Romney
¡Hasta la próxima!
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