Usted ha encontrado a su pareja e hijos por la voluntad de Dios, para crecer con ellos. Por lo tanto, una gran parte de su servicio a Dios consiste en atender bien a su familia. De igual manera, usted debe saber que si no hay perdón en una familia, ésta no puede llamarse propiamente así. Todo tipo de convivencia es difícil, pero nosotros debemos madurar y encontrar soluciones apropiadas para todos los problemas. Las pruebas son las dificultades que uno enfrenta para crecer. Recuerde que en esta vida uno sufre y goza las reacciones de lo que hizo en vidas anteriores.
No debemos rendirnos en los momentos difíciles. En la familia debemos aprender a superar el egoísmo y a vivir para los demás; pero lo más importante es que Dios esté en el centro, sólo así se puede lograr el éxito. En la Cultura Védica, todos tienen un altar en su hogar y un Maestro Espiritual a quien consultar cuando surge algún problema. Por ejemplo, cuando en el matrimonio hay discrepancias, ambos esposos aceptan la orientación de su Maestro Espiritual o de su representante. Además, aparte de trabajar para cubrir las necesidades de la familia, se deben considerar las necesidades de la Familia Espiritual.
Esta actitud y el sacrificio que se hace para ayudar a la Familia Espiritual purifica mucho la conciencia y trae grandes bendiciones al hogar. Esto enseña con ejemplo práctico a los niños que en cualquier situación dudosa siempre hay que tomar en cuenta la autoridad del Maestro Espiritual, de las Sagradas Escrituras y de los representantes genuinos de la Verdad. El principio básico de una familia es que los padres deben comportarse de tal manera que sus hijos se sientan orgullosos de tenerlos como padres. Los hijos son como discípulos, y educarlos requiere instruirlos y corregirlos constantemente para que lleven sus vidas apropiadamente; de esta manera se puede entender que ser papá o mamá es un cargo comparable al de un guía o Maestro Espiritual.
La familia debe tener mínimo una reunión por semana, en la cual se revise el progreso de sus proyectos. La familia debe tener planes a corto, mediano y largo plazo. Los de largo plazo deben ser establecidos de mutuo acuerdo desde el inicio. Igualmente es muy importante que la familia visite lugares de peregrinaje y los templos de su Maestro Espiritual para ayudar.
Además, todo hogar debe tener una biblioteca espiritual para estudiar e investigar, y la familia debe reunirse por lo menos 30 minutos todos los días para leer las Escrituras Sagradas y discutir su contenido, de esta manera Krishna (Dios) podrá estar siempre en el centro de su familia. Si Krishna no está en el centro, los egos de cada uno querrán imponerse. La tarea de un matrimonio es complementarse y servirse mutuamente, no competir. Otro aspecto de gran importancia para mantener un Hogar Espiritual es que sus miembros sean vegetarianos, que ofrezcan toda su comida a Dios antes de comer y que por lo menos una vez al día, coman juntos.
Mi Maestro Espiritual, Srila Prabhupada, recomendó a sus discípulos casados, utilizar el 50% de su energía al servicio de Krishna, ya sea en forma de donaciones o de tiempo dedicado. Claro, siempre según las circunstancias económicas de cada uno. Pero es muy importante superar el egoísmo y ser capaz de ser generoso en la vida de casado con la causa de la vida espiritual. En realidad uno nunca debe olvidar que la meta de una persona mística es ser un sirviente de Dios, de la verdad y de los demás, pues con esta actitud esa persona se hará querer por todos. La familia espiritual es un gran regalo de Dios que debemos cuidar con mucha atención.
En la vida matrimonial la vida sexual está permitida, pero hay recomendaciones para aquéllos que deseen procrear niños conscientes de Dios. Cuando la pareja quiere invitar a un niño muy especial a vivir en su hogar, debe dedicarse a muchas oraciones y meditaciones previas a la unión sexual.
El mantra más importante para invocar estas bendiciones es el sagrado maha mantra Hare Krishna:
Hare Krishna Hare Krishna
Krishna Krishna Hare Hare
Hare Rama Hare Rama
Rama Rama Hare Hare
Y se traduce: "¡Oh, mi Señor! Déjame ser un instrumento de Tu amor".
En otras palabras la unión sexual en una pareja mística es una forma de volverse el instrumento del Amor de Dios. Por otro lado, en un matrimonio místico jamás se puede practicar el aborto.
Correr detrás de los lujos materiales o tratar de competir con los materialistas en adquisiciones de esta naturaleza no es apropiado para un matrimonio místico. La pareja evolucionada espiritualmente se conforma con una vida sencilla y pensamientos elevados. Las parejas que corren como locos detrás del dinero, trabajan tanto que no tienen ni siquiera tiempo para sus propios hijos y menos para leer algo, espiritualmente siempre están en peligro y sus excesivas adquisiciones frecuentemente se vuelven objetos de litigio en la separación de bienes al divorciarse.
La razón por la cual las familias de hoy no tienen estabilidad es su carencia de espiritualidad; porque la soberbia, la agresividad y otros sentimientos negativos no tienen lugar en una hermosa familia espiritual. Para la educación de sus hijos les recomiendo escuelas rurales o escuelas religiosas donde aún existan valores espirituales, disciplina o cierta inocencia. Mejor aún, aunque un poco más difícil, es si varias personas de una misma congregación espiritual se juntan y contratan sus propios profesores para conducir una escuela privada alternada con una educación en el hogar. Claro, eso depende también de las leyes locales.
Educar a los niños con conocimiento espiritual y al mismo tiempo darles fundamentos para defenderse en este mundo material no es tarea fácil. Los mismos niños también tendrán que enfrentar sus propias dificultades para que puedan crecer espiritualmente. De cualquier manera, el elemento más importante en la formación de un niño, es la formación que recibió por el ejemplo de sus padres. Por ello, la lucha de la pareja juntos es muy admirable. Y ya en la vejez uno podrá percibir si luchó bien o no.
Para terminar debemos recordar que donde haya algún tipo de droga, alucinógeno o alcohol, será imposible tener una familia sana. Igualmente uno debe evitar los juegos de azar, pues es una adicción que ha dejado a muchas familias en la ruina. Entonces, para que uno pueda vencer todas estas debilidades y volverse un padre o una madre mística, necesita especialmente de una muy buena asociación, que significa estar con personas realmente dedicadas a la espiritualidad.