La tendencia a dormir demasiado es una tendencia que todos tenemos, sobre todo porque nos gusta dormir cuando despertar es incómodo. La situación de los reactores nucleares de Japón en 2011 es un ejemplo de ello. Por ejemplo, hemos dormido tanto pensando que la amenaza de Chernobil se acabó y que ahora la energía nuclear está en manos de los grandes expertos técnicos, cuando en realidad este mundo está en un gran peligro debido al deseo de explotación de los materialistas en prácticamente todas las áreas.
Y solamente si uno vive una vida realmente sencilla, usando los recursos naturales sólo para servir a Dios y evita lujos innecesarios, uno podría decir que ha hecho frente a la situación actual: un desastre mucho mayor que el de Chernobil. Las plantas nucleares son, a fin de cuentas, bombas atómicas en potencia.
Comparo esto con nuestra negligencia de no producir comida orgánica, de no promover los baños secos, de no poner atención a nuestras aguas, a nuestros aires y a otros aspectos ambientales. Debemos cuidar a nuestra madre, la Tierra, como buenos hijos. Debemos promover los valores superiores. Lo que el mundo necesita es frugalidad, conformarse con menos y fomentar la conciencia de Dios.
Me gustaría despertar a todos mis amigos y lanzar al mundo un llamado de atención. ¿Y cuál es este llamado? Es el llamado contra la matanza de los animales. Por ejemplo, Japón ha sido uno de los países que ha promovido la matanza indiscriminada de ballenas y delfines para lucrar, pero la cantidad de pecados que el hombre comete contra los animales o contra la madre naturaleza es inmensa, así que el karma no pertenece sólo a Japón.
No podemos quedarnos en silencio en momentos tan dolorosos, ante la ley de la acción y la reacción, ante las calamidades que el hombre está creando alrededor de los seres indefensos de la Tierra. Ante la política de los países ricos que prácticamente en todo el mundo han instalado sus sistemas autoritarios, dictaduras o corrupción. Tenemos que intensificar nuestras actividades espirituales, dejar de dormir y dejar se ser víctimas de nuestras comodidades. Ni una bomba atómica puede destruir el alma espiritual, dijo Srila Prabhupada.
Hay que sacar provecho de todo lo que sucede en esta vida, todo cumple un propósito si sabemos sacar provecho, incluso de los desastres. Oremos siempre para que la gente sea feliz y pueda superar sus actividades erróneas, oremos por las almas que han sufrido, para que puedan descubrir la belleza de su ser puro, pues sólo al descubrir a este ser puro se descubre el espíritu servicial.
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