Todos, en algún momento hemos recibido mensajes de los ángeles. Lo que pasa es que no somos conscientes de ello.
Siempre he dicho que los mensajes de los ángeles en realidad son los mensajes de Dios. Ellos, como bien sabemos, son mensajeros y la labor de un mensajero es entregar el mensaje que alguien desea entregar a otra persona. De tal manera, es fundamental que siempre recordemos que los mensajes provienen originalmente de Dios y Sus ángeles simplemente se encargan de hacérnoslos llegar. Nuestro libre albedrío determina si lo aplicamos o no en nuestra vida.
¿Cómo saber o identificar si lo que estamos recibiendo proviene de los ángeles o es nuestra imaginación? Usted puede reconocer si lo que escucha, percibe o siente NO es un mensaje de los seres de luz si siente lo siguiente:
•Miedo
•Confusión
•Duda
•Si el mensaje lo hace sentir culpable o inferior
•Si el mensaje es brusco, duro, hiriente o hasta con insultos
•Si el mensaje es negativo en cualquier forma
•Si le hace sentir que usted es más que los demás y quiere alimentar su ego
•Si el mensaje le dice que puede conseguir fama y dinero en poco tiempo
•Si el mensaje le dice que puede alejar o atraer a una persona 'a la fuerza' (es decir, violentando su libre albedrío)
•Si recibe consejos para hacer cosas que usted en el fondo sabe o siente son incorrectas o no le convienen
Estas son algunas de las características que puede tener en cuenta para reconocer un mensaje que no proviene de los ángeles. Los seres de luz NUNCA le entregarán un mensaje o señal que busque hacerle sentir mal o alimentar su orgullo o ego. Los mensajes de Dios son siempre mensajes de amor, paz y armonía.