Él no da miedo, es un niñito

Esto es algo que espero que todos lean y compartan. Éste es un mensaje que no sólo concierne a mi hijo Jameson, sino a todos los niños de quienes se burlan o a quienes señalan por sus diferencias.
This post was published on the now-closed HuffPost Contributor platform. Contributors control their own work and posted freely to our site. If you need to flag this entry as abusive, send us an email.

Recientemente hemos tenido algunos encuentros que me han inspirado a escribir este post. Esto es algo que espero que todos lean y compartan. Éste es un mensaje que no sólo concierne a mi hijo Jameson, sino a todos los niños de quienes se burlan o a quienes señalan por sus diferencias; y estoy casi segura de que sus padres se sienten igual a como me siento yo.

Quiero comenzar diciendo que no tengo nada en contra de estos niños, o de sus padres. Entiendo que puede ser extremadamente incómodo cuando es tu hijo quien está burlándose o siendo cruel hacia otro niño. Pero la próxima vez que esto suceda espero que estos padres hagan algo más. Porque aunque no lo puedo tomar como ofensivo, mentiría si digo que no me ha dolido. Duele. Duele ver cómo se burlan de mi hijo, sabiendo que esto será gran parte de su mundo el resto de su vida.

A este punto te estarás preguntando qué sucedió como para dar pie a estas palabras. No ha pasado nada que no haya pasado antes, y tristemente pasará otra vez. Pero por alguna razón, ha sucedido mucho durante las últimas semanas.

Recientemente nos mudamos a un nuevo pueblo, y el mayor de nuestros hijos está en 1er grado. La segunda semana escolar hubo un open house para ver la escuela y conocer a su maestro. La escuela entera, de kinder a 5to grado, fue reunida en el comedor para escuchar comentarios del comienzo escolar y bienvenidas. Mientras caminábamos hacia la cafetería llena de gente nos saludó un niñito que señaló a Jameson, le dio un empujoncito a su mamá, y le dijo que se veía gracioso. No le prestamos mucha atención y continuamos nuestro paso a través de la cafetería buscando un sitio para sentarnos. Poco después de sentarnos dos niñitas y su mamá se sentaron al otro lado de nosotros. Una niñita nos miró, se volvió hacia su mamá y dijo "Él da miedo", señalando a Jameson. Su mamá le dijo que no estaba bien decir eso, y se volteó.

El fin de semana pasado, en el supermercado con mis niños, una madre y su hijo caminaban en el pasillo hacia nosotros. Veo al niñito mirar hacia arriba; le sonrío. Él comienza a reírse, y le dice a su mamá, "Mira mamá, ese bebé se ve gracioso", riéndose. Yo miro a su mamá y ella no puede armarse de valor para pronunciar una palabra, con la mandíbula abierta.

Como madre he estado en situaciones donde mi hijo ha hecho o dicho algo inapropiado, así que entiendo el bochorno. También entiendo que a estos niños no se les puede culpar. Piénsalo, desde que nacen les enseñamos a separar cosas. Poner un grupo de bloques juntos, incluir uno verde, y luego decirle que busque el verde, el distinto. Clasificar las figuras geométricas que sólo entran en un hueco específico. Nunca pondrías algo redondo en un hueco cuadrado. El redondo es el equivocado. Está bien notar las diferencias. Así es que nos identificamos los unos a los otros. Enseñamos qué es algo, mostrando lo que no es. Pero estos son objetos. Los podemos organizar y escoger los correctos, los que caben. No podemos hacer esto con la gente; con los niños.

Como madre de un niño que luce distinto, ésta es la súplica que te hago:

Si eres un padre cuyo niño le dice a otro niño que éste luce gracioso o que da miedo, decirle simplemente eso y darte la vuelta no deja de aislar a mi hijo. La próxima vez, haz esa declaración y dile a tu hijo. "Estoy segura de que es un niño muy bueno, vamos a conocerlo". Por favor, ven y preséntate y pregunta el nombre de mi hijo. ¡Te aseguro que no mordemos! Mi hijo es tal como el tuyo; puede ser dulce, amoroso, hacer berrinches y ponerse difícil. Te lo aseguro, yo soy tal como eres tú; soy una madre que todavía está aprendiendo.

Si tu hijo tiene curiosidad y no dice nada malo, pero nota que un niño es distinto, por favor, preséntate con nosotros, ¡pregúntanos nuestro nombre! Incluye a mi hijo en tu mundo. Te lo prometo, él no da miedo, es sólo un niñito.

A todos los padres y niños que ya practican esto, y a aquellos que intencionadamente ya han hecho su parte para alegrar el día de Jameson cuando nuestros caminos se han cruzado: Gracias. Desde el fondo de mi corazón, gracias. Honestamente les puedo decir que recuerdo vívidamente cada encuentro con un extraño que ha hecho un esfuerzo consciente de querer conocer a Jameson e incluirlo en su mundo. Y apuesto que él también. Mi niño de 6 años me sorprende cada vez que lo escucho relatar un recuerdo de cuando tenía 3 años, así que estoy segura de que Jameson recuerda lo mismo.

O sea, en serio, ¿cuán malo se ve este niño con su carita feliz cubierta de S'mores?

aliceann meyer

Este texto fue publicado en inglés en HuffPost Parents. La traducción es de Marinés Arroyo.

Popular in the Community

Close

What's Hot