Hay ocasiones, días, semanas o acaso instantes en los que todo lo que nos rodea parece caerse a pedazos. El espíritu se siente desamparado y uno no sabe qué pensar, qué decir o simplemente dónde posar la mirada.
This post was published on the now-closed HuffPost Contributor platform. Contributors control their own work and posted freely to our site. If you need to flag this entry as abusive, send us an email.

"Cuando todo parece terminado, surgen nuevas fuerzas. Esto significa que vives".
-Franz Kafka

CREER

Hay ocasiones, días, semanas o acaso instantes en los que todo lo que nos rodea parece caerse a pedazos. El espíritu se siente desamparado y uno no sabe qué pensar, qué decir o simplemente dónde posar la mirada. El mundo se vuelve otro, una cosa distinta, algo como una película macabra que estuviéramos viendo desde muy lejos: no reconocemos la vida y la existencia nos duele como una herida abierta.

Yo también he estado ahí. Sé lo que es la desesperación y la sensación de abandono; he pasado por momentos en los que una frustración total me ha llevado a pensar que vivo una pesadilla: "voy a despertar y el mundo será bueno", me he dicho, pero no despierto. Sigo ahí, vivo, sufriendo en cuerpo y alma.

Sin embargo, todo pasa, todo se aquieta, el sol vuelve a despuntar. No hay dolor ni circunstancia, por dura que ésta sea, que no se diluya. El poder de la persona es sorprendente; de las cenizas vuelve a brotar la vida -muchas ocasiones purificada y fortalecida- con su carga de esperanza y aliento. Los años nos enseñan estas benditas cosas.

Lo dicho: somos un milagro.

Les mando un abrazo, amigos.

-alx

Popular in the Community

Close

What's Hot