Obama reveló en entrevista con la cadena BBC que su “mayor frustración” en el tiempo que lleva en la Casa Blanca es que no ha podido pasar una ley para el control y uso con sentido común de las armas de fuego.
A 18 meses de terminar su último y segundo mandato, el presidente habló de cómo se siente por el incremento de hechos de violencia en Estados Unidos, que han dejado más víctimas que los ataques terroristas en territorio nacional.
“Si me preguntas cuál es el área en la que me he sentido más frustrado y obstaculizado es con el hecho de que Estados Unidos es una de las naciones más avanzadas de la tierra y en la cual no tenemos suficiente control de las armas […] Si miras los números de estadounidenses que han muerto desde los ataques terroristas del 9/11 son menos de 100, pero si miras los números de los que han muertos por violencia con armas de fuego son cientos de miles”, precisó.
Las declaraciones de Obama ocurren el mismo día en que un hombre abrió fuego en un cine de Lafayette, Louisiana, hecho en el que murieron tres personas, incluyendo el pistolero.
La semana pasada hubo otro tiroteo en una base del Navy en Chattanooga, Tennessee, donde murieron 7 oficiales de la Marina. Charleston, Carolina del Sur protagonizó otra masacre en una iglesia afroamericana, donde perdieron la vida nueve personas después que un joven blanco comenzara a disparar mientras los creyentes estaban en un estudio bíblico.
Barack Obama ha abordado en otras entrevistas el complejo debate sobre la raza y el uso de las armas de fuego en el país.
"Sobre el racismo, no estamos curados", ha dicho el presidente, poniendo como ejemplo que no basta con no emplear por educación una palabra peyorativa para referirse a los afroamericanos.
"Esa no es la medida de si el racismo todavía existe o no. No es sólo una cuestión de discriminación abierta. Las sociedades no borran por completo de la noche a la mañana todo lo que ocurrió 200 o 300 años antes", destacó la agencia AP.
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