Después de cinco días de homenajes, misa y recorrido en la carroza fúnebre, Joan Sebastian fue sepultado en el campo santo de Juliantla, México, pueblo que lo vio nacer y en donde ahora descansará en paz.
El cuerpo de Joan Sebastian fue trasladado de la Ciudad de México a Juliantla. Antes de la ceremonia final en le cementerio, la familia llevó el ataúd al rancho en donde nació, y que el "Poeta del Pueblo" reconstruyó para conservar su primer hogar.
Luego de unas horas donde solo lo acompañaron su viuda, sus hijos y hermanos, nuevamente el féretro se subió a la carroza fúnebre hasta la iglesia del Rosario, donde se le realizó una última misa de cuerpo presente.
Finalmente sus restos fueron trasladados al cementerio de Juliantla, donde centenares de seguidores y lugareños acompañaron a los familiares para darle el último adiós a su ídolo.
Luego de una pequeña ceremonia y las palabras de sus hijos, que después de cinco días se veían muy cansados, el ataúd de Joan Sebastian comenzó a bajar mientras las personas presentes aplaudían y su familia lloraba.
Aunque se había hablado de cremar y poner las cenizas en una urna que el cantante había comprado, cuenta el diario El Universal, que habitantes de Juliantla se acercaron al velatorio para pedirles que llevaran los restos al pueblo que lo vio nacer.
Ahora sí descansa en paz Joan Sebastian en la tierra que le dio la vida y hoy lo recibe para su morada final.
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