En una entrevista con "Extra" , que se transmitió este jueves, Obama le confirmó al corresponsal Jerry Penacoli, que sí responde las cartas de sus críticos.
"Yo tomo 10 por noche de las 40 mil cartas, emails y mensajes que recibo. Algunos me dicen 'gracias' , pero otros me dicen 'tú eres un idiota'".
"¿Se sorprenden de que les responden?", preguntó Penacoli.
"Yo pienso que algunas veces sí", dijo Obama. "Trato de responder a sus inquietudes".
Miles de cartas, correos electrónicos y faxes llegan diariamente a la Casa Blanca y un centenar de esos terminan en el escritorio de Mike Kelleher, el director de la Oficina de Correspondencia de la casa presidencial. Ahí comienza su ardua tarea de escoger aquellos mensajes que mejor reflejen el sentir y pensar del pueblo americano.
Solo 10 son colocados en una carpeta morada que llega al escritorio del mandatario estadounidense, quien las lee y responde algunas a mano. Este proceso epistolar sirve de termómetro a Obama para medir las opiniones de sus seguidores y detractores. Más allá de proveer un medio de desahogo para la vox pópuli, las cartas sensibilizan a Obama sobre lo que pasa fuera de las cuatro paredes de la oficina oval.
Al abrir cada sobre, lo mismo puede recibir un dibujo en crayola de un niño que una acalorada crítica o desgarrante petición, de acuerdo con The New York Times.
h/t: HuffPost Politics