Sabemos que a las focas les gusta que les soben la pancita bajo el agua, pero que los tiburones disfruten de las mismas caricias sí que es una gran sorpresa.
Un buzo estaba limpiando el tanque del Aquarium des Lagons en Noumea, Nueva Caledonia, cuando un curioso tiburón se le acercó en busca de amor.
En el clip se observa que en cuanto el animal nadó cerca de él, el buzo detuvo su tarea para prestarle un poco de atención a su amigo. Los cariñitos comenzaron y la sobada de panza se hizo presente.
El tiburón del video publicado en YouTube en abril pasado por el propio acuario, parece ser un tiburón cebra, una especie que generalmente es inofensiva para los humanos en su hábitat natural, según indica el Museo de Historia Natural de Florida.
Lo que se aprecia en las imágenes bien podría ser un estado de trance de los tiburones al que los investigadores se refieren como inmovilidad tónica. Esta técnica es consecuencia de la estimulación sensorial que bloquea en los escualos su capacidad de respuesta. Con fines de investigación, al tiburón se le coloca gentilmente con el vientre hacia arriba, o se posicionan estratégicamente las manos cerca del hocico del animal, de acuerdo con el grupo conservacionista Shark Trust.
Se trate o no de inmovilidad tónica, a este adorable tiburón parecen encantarle las caricias en la barriga.
--Esta nota fue publicada originalmente en inglés por Carla Herreria en HuffPost Green. La versión en español es de Sonia Ramírez.
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