Si necesitas más pruebas de que nuestros teléfonos siguen volviéndose más inteligentes y nuestros cerebros siguen tornándose más tontos, solo trata de recordar algún número telefónico que no sea el tuyo.
Y no, tu mamá no cuenta.
Es fácil olvidar las cosas que nuestros teléfonos hacen por nosotros a diario, algo que es solo una de las miles de razones por las que sentimos ansiedad cuando (Dios no lo quiera) lo dejamos en casa. No puedes llegar a ningún sitio, no puedes contactar a nadie y ahora tu amiga piensa que la odias porque no le deseaste un feliz cumpleaños. Es un desastre.
Con la intención de ser conscientes de nuestras cosas –y con la esperanza de evitar que estas cosas desaparezcan de nuestras mentes para siempre– he aquí un vistazo a tan solo nueve cosas que probablemente ya olvidaste cómo se hacen. No te preocupes, todavía hay tiempo para trabajar en estas habilidades antes de que implanten chips de teléfonos inteligentes directamente en nuestros cerebros.
1. Números telefónicos
La más obvia. Antes podías mencionar los números telefónicos de todos tus amigos cercanos y de tu familia. Ahora incluso necesitas revisar cuál es el número de tu media naranja cuando se te pide que escribas quién es tu contacto de emergencia. Oigan, ¿cuál es el número del lugar de las pizzas que pedimos todos los viernes? Ah, cierto, las pedimos en Seamless.
Ella está más confundida porque sigue usando un teléfono 'flip'.
2. Cumpleaños
Facebook se ha encargado de recordarnos la tarea de adivinar cuándo nació la gente. ¿Realmente significa algo un mensaje genérico de "Feliz cumpleaños" en el muro de alguien cuando fue una notificación la que te obligó a hacerlo? ¿O qué tal cuando Facebook te dice que es el cumpleaños de cinco personas distintas y solo quisieras desearles feliz cumpleaños a todas juntas? Incluso usas copiar/pegar porque eres demasiado flojo como para escribir "Feliz cumpleaños" una y otra y otra vez. ¿En dónde está el sentimiento genuino de eso?
3. Una división larga
¿Recuerdas cuando tu profesor de matemáticas de la secundaria te dijo que tenías que aprenderte esto porque no ibas a estar cargando una calculadora contigo todo el tiempo? Bueno, intenta recordar cómo dividir números en papel y agradecerás que literalmente todos los teléfonos incluyan una aplicación de calculadora. ¿Tienes que calcular una propina? Hay una app para eso. ¿Dividir los gastos con tu roommate? Hay una app para eso. Hasta que llegue el día en el que alguien te amenace con matarte a menos que le digas cuál es el área de un triángulo isósceles, seguramente estarás bien.
"No saques el iPhone en plena clase. No saques el iPhone en plena clase...".
4. Cómo escribir un cheque
Gracias a Paypal, Apple Pay y apps como Venmo, los cheques de papel se están volviendo parte del pasado análogo. ¿Tienes que escribir "y cero centavos" sobre la línea de la cantidad? ¿Para qué era el espacio del memo? ¿Y dicen que tengo que ir físicamente al banco? Por suerte está bien si olvidas firmar la parte de atrás del cheque cuando intentes cobrarlo, porque ahora puedes simplemente tomarle una foto con tu celular y luego romperlo.
5. Cómo escribir en cursivas
Tal vez puedas escribir bien tu nombre, pero intenta escribir una "k" o "z" minúsculas y en cursivas, y verás que lucen bastante mal. Los niños de hoy ni siquiera tienen que aprender a escribir en cursivas en las escuelas, algo que es un poco triste. Todos tuvimos que sufrir con eso, ¿así que por qué ellos no? Pero como ocurre en todo, lo próximo serán las clases con mensajes de texto y pronto evolucionaremos para tener más grandes y musculosos pulgares que sean nuestra forma primaria de comunicación.
6. En general, escribir
Esto es un poco embarazoso. ¿Te has fijado cómo luce tu escritura últimamente? Si has estado pasando la mayor parte de tu tiempo usando una computadora o un teléfono, es horrible. Esa hermosa caligrafía de tu adolescencia ha sido reemplazada por garabatos apenas legibles y te duele la mano luego de escribir una o dos páginas. Santo cielo.
7. Dar instrucciones para llegar a un sitio
Si alguien te invita para verse en un bar o un restaurante y tu primera pregunta es, "¿Cómo llego allí?", probablemente no te gustará la respuesta de tu amigo. Está bien, un simple "¿Qué estación del metro queda cerca?" es aceptable, pero sabes que tendrás que buscar en Google para obtener la dirección exacta. Las probabilidades son, si están preguntando, que no tengan un teléfono consigo, que éste no funcione, o que estén usando la imposible aplicación de mapas de Apple.
"Te dije que debimos haber pagado AT&T por el plan internacional".
8. Cómo esperar a alguien en público
En lugar de decir, "búscame por la fuente a las 3:00", y no saber de ellos hasta que lleguen al lugar, ahora recibes actualizaciones minuto a minuto de la persona con la que te vas a encontrar para saber su ubicación exacta. Apenas puedes recordar cómo es tener que quedarte de pie en silencio, mirando nada en particular y dejando que tus pensamientos fluyan porque estás muy ocupado escuchando un podcast, jugando Candy Crush y rastreando la ubicación de tu amigo. ¿Ese bello desconocido te acaba de saludar? A quién le importa, acabas de conocer a alguien en Tinder.
9. Cómo escribir palabras complicadas si consultarlo
El corrector de ortografía, la predicción de texto y su peculiar hermano "texto a través de voz" hacen que casi sea imposible recordar cómo se escriben palabras que lleven una "h" intermedia o una combinación de "s" y "c". Cuando escribes algo mal la computadora lo subraya para que lo detectes y te ofrece una solución para corregir. Combina esto con el punto #5 y el futuro no luce nada bien para la palabra escrita. ¡Gracias, tecnología!
--Esta nota fue publicada originalmente en inglés por Katla McGlynn en HuffPost Comedy. La traducción es de Sonia Ramírez.
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