La imagen es realmente impactante. Se trata de un cocodrilo que nada tranquilamente en el agua llevando entre sus fauces a un perro. Lo más triste de la escena es que seguramente se trataba de la mascota de alguien, porque en el cuello de lo que parece ser un labrador negro se aprecia un collar rojo.
El video que puedes ver arriba se publicó el lunes en YouTube, y aunque es incierto el lugar en el que fue grabado, se cree que los hechos pudieron haber ocurrido en el sureste de Estados Unidos, en donde los cocodrilos son una plaga y suelen atacar a animales pequeños.
Las escalofriantes imágenes salieron a la luz una semana después de que una perra fuera atacada ferozmente por un caimán en Boynton Beach, Florida, un suceso que levantó un estado de alarma entre los habitantes del área.
"Los cocodrilos son depredadores", le dijo al Sun Sentinel el biólogo Lindsey Hord, quien trabaja en el Alligator Management Program. "Eso es lo que pone a los perros en peligro. Un perro es solo un pequeño mamífero, y ellos han comido pequeños mamíferos durante años".
El experto recomendó a la gente tener especial cuidado con sus hijos y sus mascotas cuando estos estuvieran jugando cerca del agua en el sur de Florida. Una vez que un cocodrilo ataca, lo mejor que puede hacer alguien es correr tan veloz como le sea posible, sugirió Hord.
"Cuando te has alejado del borde del agua, la probabilidad de que el cocodrilo represente un peligro se reduce exponencialmente", comentó Hord en entrevista para el Sun Sentinel.
De acuerdo con National Geographic, aunque sobre la tierra estos reptiles son lentos, desde el agua pueden emboscar a sus presas lanzándose a unas 30 millas por hora. Sus mandíbulas son extremadamente poderosas y pueden infligir sobre sus presas una mordida de hasta 2 mil libras de fuerza.
--Esta nota fue publicada originalmente en inglés por Ryan Barrell en HuffPost UK. La versión en español es de Sonia Ramírez.
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