Un perrito amputado está viviendo una vida con más posibilidades con ayuda de sus nuevas prótesis.
Brutus, un Rottweiler de Loveland, Colorado, es un amputado cuádruple que antes tenía problemas para caminar. Pero a finales del año pasado, el can recibió prótesis para sus cuatro extremidades, de acuerdo con KDVR. Desde entonces el perro ha estado aprendiendo a ajustarse a sus nuevas patas y pronto comenzará con su terapia física a largo plazo que lo ayudará a caminar más fácilmente, según le dijo a The Huffington Post la dueña de Brutus, Laura Aquilina.
Brutus, con sus nuevas prótesis.
Cuando Brutus era un cachorro, sus criadores lo dejaron afuera en temperaturas heladas y sus patas terminaron severamente congeladas, explicó Aquilina a HuffPost. La mujer contó que los mismos criadores le amputaron las patas al perrito, dejándolo severamente lastimado.
"Le quitaron las patas a excepción de la extremidad anterior izquierda, que tiene un poco de relleno residual", añadió.
"Si no tuviera las prótesis, él estaría esencialmente confinado a habitaciones con alfombra", dijo Aquilina, explicando que las superficies duras le resultaban incómodas al can para caminar. "Pero es un perro muy activo, ¡ahora está comenzando a actuar como un animal de verdad!".
Brutus, sin sus prótesis.
El perro fue brevemente cuidado por una familia que lo rescató, pero eventualmente terminó con Aquilina. Conforme el cachorro creció, Aquilina se dio cuenta de que él tendría problemas para moverse. Con ayuda de la rescatista de animales Laura Ornelas, Aquilina se puso en contacto con Orthopets en Denver, un grupo que desarrolla prótesis para animales. Las dos comenzaron también una página en GoFundMe para recolectar dinero para las nuevas patitas del perro.
La recaudación de fondos fue exitosa, y Brutus fue sometido a cirugía para corregir algo del daño provocado por su mala amputación, y luego recibió sus extremidades artificiales.
Aquilina le dijo a HuffPost que el can está notablemente más feliz y que está disfrutando su vida con mayor movilidad. Ella espera que el perro continúe logrando avances con ayuda de su terapia física en el Colorado State University's Veterinary Teaching Hospital, y espera que su vida activa vaya en ascenso.
Y aunque Brutus todavía no está completamente cómodo con sus prótesis, Aquilina dice que su historia es prueba de que con el cuidado adecuado, los animales con discapacidades pueden tener un futuro feliz y saludable.
"Si hubiera terminado en un refugio habrían dicho que no era adoptable porque le faltaban los pies", le dijo la dueña a KDVR. "Creo que es bueno que la gente sepa que podemos trabajar con animales como éste".
Para conocer más sobre Brutus, visita la página de Facebook dedicada al perrito aquí.
--Esta nota fue publicada originalmente en inglés por Kimberly Yam en HuffPost Good News. La traducción es de Sonia Ramírez.
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