La primera dama dio muestras del más respetuoso protocolo al visitar el Palacio Imperial de Tokio y rendir reverencia al emperador Akihito y su esposa, la emperatriz Michiko.
En la foto se aprecia que Michelle Obama flexiona su pierna en gesto de respeto hacia los miembros de la realeza nipona.
De acuerdo con el tabloide británico The Daily Mail, en el momento del saludo, la primera dama tuvo una incómoda situación pues aparentemente no tuvo la mejor coordinación y tropezó, al tratar al mismo tiempo, de inclinarse, hacer la reverencia y estrechar la mano del emperador.
Michelle Obama mide alrededor de 5 pies, y unido a los tacones que llevaba, pues el saludo no fue una cuestión tan fácil para la altura de la esposa de Barack Obama.
Momentos antes, la primera dama de Japón, Akie Abe, invitó a Michelle Obama a comer en un tradicional restaurante japonés en el exclusivo barrio de Kanda.
En ese encuentro hubo otra situación no muy cómoda para Michelle Obama cuando trató de saludar a la primera dama japonesa con una combinación de abrazo y estrechón de mano. Se aprecia en la foto cómo Akie Abe trata de arquearse para evitar el contacto físico.
El excesivo contacto físico no es una práctica común en Japón. Si se sigue el más estricto protocolo gubernamental, la reverencia es lo mejor visto a nivel de etiqueta política.
Obama ha experimentando situaciones similares anteriormente. Mira la foto con la opositora Aung San Suu Kyi de Birmania, nación del sudeste asiático.
Mira las fotos:
h/t: Daily Mail
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