Incluso en las condiciones climáticas más frías, este hombre sin hogar se negó a dejar a su amado amigo.
Durante años, Bernard Holland y su perro Oreo se han quedado en una tienda de campaña en un campamento para personas sin hogar en el centro de Indianápolis. A principios de este mes, un trabajador social de Horizon House –un centro multiservicios para personas sin hogar– vio a la pareja al aire libre durante una noche en la que la temperatura había descendido bajo cero, y alentó a Holland a pasar la noche en un refugio. El hombre de 53 años, quien está fuertemente apegado a su perro, se rehusó.
"Bernard le dijo [al trabajador] que no podía ir a un albergue a menos que Oreo tuviera un lugar también", le dijo en un email a The Huffington Post Mary Stickelmaier, directora de desarrollo y comunicaciones en Horizon House.
Holland sabía que el clima helado no le hacía bien a su perro, así que le pidió a Burgess que hallaran un plan de cuidado temporal para Oreo. Burgess se puso en contacto con Wigglebutt Doghouse, un centro local de atención para perros, que accedió a cuidar al perro temporalmente, con el objetivo de que luego ambos se reunieran. El dueño del centro, Ben Bierlein, incluso pagó los gastos veterinarios de Oreo.
Holland se dijo agradecido por el arreglo conseguido.
"Fui realmente bendecido", le dijo Holland a Indy Star. "A mi perro lo están cuidando, y yo tengo suficientes frazadas para mantenerme caliente".
El hombre de 53 años se encuentra actualmente trabajando con Horizon House para conseguir empleo y vivienda permanente, según le dijo Stickelmaier a HuffPost. Visita regularmente a Oreo, y está a la espera de reunirse con su amado canino de manera permanente.
Para saber más de Horizon House o hacer una donación, haz click aquí.
--Esta nota fue publicada originalmente en inglés por Kimberly Yam en HuffPost Good News. La traducción es de Sonia Ramírez.