La Boston terrier de Shannon Williams, Memory, solía tenerles miedo a los gatos.
Luego, Memory se convirtió en mamá subrogada de una camada de gatitos, a los que según se informa, comenzó a amantar, a pesar de no haber estado embarazada.
De acuerdo con la descripción de un video de YouTube en donde Memory alimenta a los gatitos, los pequeños fueron hallados afuera, fríos y mojados, cuando tenían alrededor de una semana de edad.
Y de inmediato, dice Williams, Memory, de 5 años, comenzó a acurrucarse con los pequeñines y a alimentarlos –dos niños y dos niñas, llamados Don Mickey, Luke, Whiskers y Mittens.
"Ha sido muy protectora desde el día uno", le dijo Williams a The Huffington Post. "En el segundo día que los tuvimos, mi hija tenía a uno de los gatitos en sus manos. Y mi perra Memory se lo quitó de las manos y lo cargó de vuelta a su cama con el resto de los gatitos".
"Los subía al sofá con ella. Si se paraban y empezaban a caminar por el borde del sofá ella se paraba, los tomaba con su hocico y los acostaba junto a ella".
Esto fue adorablemente inesperado por muchas razones, incluyendo que previamente Memory les tenía pavor a los felinos, le dijo Williams a WMBF, afiliado local de NBC en Carolina del Sur.
"Teníamos un gato y ella huía de él", le dijo Williams al medio. "Incluso sus antiguos dueños dijeron que Memory moría de miedo ante los gatos".
Luego las cosas dieron un giro aún más inesperado: Memory comenzó a alimentar a los gatitos huérfanos.
"Ella comenzó a producir leche", dice la descripción del video.
Memory con sus gatitos. Crédito de la foto: Shannon Williams.
Suena loco, ¿verdad? Pero eso es totalmente posible.
"Existe una condición llamada pseudoembarazo, o embarazo falso", le dijo la Dra. Amy Welker, veterinaria de Union County Humane Society en Marysville, Ohio, a HuffPost.
En las perras, el embarazo falso puede aparecer debido a fluctuaciones hormonales, y los síntomas pueden incluir la producción de leche.
Las perras que atraviesan un embarazo falso también pueden desarrollar un "tipo de comportamiento de anidación", dice Welker, quien explica que los dos meses en los que en teoría Memory alimentó a los gatitos son generalmente tiempo suficiente antes del destete, aunque también puede hacerse antes, si eso es lo mejor para la mamá.
"O perra", dice.
¡Gatito! Crédito de la foto: Shannon Williams.
Una vez que comenzaron a comer alimento sólido, Williams dio a tres de los gatitos a hogares locales, en donde los nuevos dueños prometieron mantener a sus nuevos y peludos miembros de la familia dentro de casa, y dijeron que dejarían a Williams y a su hija visitarlos.
Preocupada porque Memory pudiera deprimirse sin sus crías maullando, Williams decidió quedarse con Luke.
"[Memory] sigue actuando como mamá con el que nos quedamos", dice Williams. "Él sigue intentando alimentarse de ella. Ella lo deja durante un minuto y luego comienza a jugar con él".
¿Y cómo fue para Williams ver a su perrita temerosa de los gatos convertida en una mamá de gatitos? Bueno, ésa debe ser la única cosa predecible en toda esta historia.
"Fue maravilloso", dice la mujer.
Memory con Luke. ¡Los amamos! Crédito de la foto: Shannon Williams.
--Esta nota fue publicada originalmente en inglés por Arin Greenwood en HuffPost Good News. La traducción es de Sonia Ramírez.
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