Franco Nieto, futbolista asesinado en Argentina, era buen padre y trabajaba de jornalero

Futbolista asesinado de un ladrillazo: Era buen padre y trabajaba de jornalero

La muerte de Franco Nieto, le dio la vuelta al mundo y con razón. El asesinato de un jugador en plena cancha a manos de un chico de 16 años, es un evento aterrador por dondequiera que se le vea y volvió a poner al descubierto los alcances de la violencia en el fútbol.

El pasado 3 de diciembre Nieto de 33 años falleció por la heridas recibidas en una bronca que se desató en el partido entre Tiro Federal y Chacarita en la Liga de Aimogasta, cabecera del Departamento Arauco, en el norte de la provincia de La Rioja, Argentina.

Por estos hechos fueron arrestadas tres personas: Un menor de apellido Díaz, quien se supone asestó un ladrillazo fatal en la cabeza a Nieto y dos miembros del equipo rival: Jorge 'Molesto' Barrionuevo y Emanuel 'Manolo' Molina, este último, señalado como el iniciador de la pelea campal.

"A Franco no sólo lo atacaron los hinchas, sino jugadores del equipo de Chacarita Jrs., equipo por el que ya en varias oportunidades se registran disturbios. Lo mataron unos inadaptados, posiblemente drogados", dijo a HuffPost Voces, Martín Herrera, director del portal de noticias local Arauco Digital.

"Franco era un buen hombre, trabajaba en una parcela de olivos, vivía con su esposa Antonia y sus tres hijos", agregó Herrera sobre el futbolista y jornalero, quien como tantos otros dividen su vida entre el fútbol y el trabajo para subsistir.

"Acá no existen Barras Bravas, es un pueblo chico, ningún club debe tener más de 100 hinchas en las gradas. Quienes atacaron a Franco fueron los jugadores de Chacarita Jrs. Es un equipo poderoso en la liga pero últimamente los resultados no les acompañan. En el 2012 agredieron a un árbitro", concluyó Herrera.

hinchas argentinos
Imagen provista por Aracuo Digital, muestra aspecto de las tribunas en la Liga de Aimogasta

El estremecedor suceso también puso al descubierto el olvido en el que se encuentran los futbolistas amateurs. A decir de Facundo de Palma, columnista de Clarín, el gremio profesional ignoró la tragedia con su estruendoso silencio.

"Nada se escuchó después del deceso de Franco Nieto de los sindicalistas que tiempo atrás se espantaban ante la inacción estatal: "¿Qué están esperando, que maten a un jugador?". Ese día llegó, pero el gremio no fue siquiera capaz de ofrecerle sus condolencias a la familia de Nieto", acusó De Palma en su columna de este lunes.

Por otra parte está la subvención con fondos públicos para el fútbol. En una editorial, La Nación criticó el accionar del gobierno, que pese a dilapidar parte del erario en este deporte, se vuelve cómplice en eventos fatales como la muerte de Nieto.

"Incapaz de dar batalla contra los principales flagelos que soporta la ciudadanía, como el narcotráfico, la inseguridad y la inflación, el Gobierno resulta cómplice de ellos, y en el fútbol no sólo no combate a las barras bravas sino que las alienta y las emplea como fuerzas de choque en actos políticos. Una prueba más de la libertad de acción que tienen las barras bravas se vio el martes en La Rioja, donde Franco Nieto, jugador de Tiro Federal de esa provincia, fue asesinado de un ladrillazo por barras bravas de Chacarita, otro equipo de esa provincia", criticó el diario argentino.

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