"Mi padre me puso en la cárcel", con estas palabras Amanda Bynes se subió a la camioneta que la esperaba en el aeropuerto de Los Angeles para trasladarla a un hospital psiquíatrico de manera involuntaria.
Las imágenes de la llegada y toda la explicación que Amanda le da a los paparazzis se puede ver en la página de TMZ. Mientras ella caminaba hablando, supuestamente, por su celular le decía a los fotógrafos que no entendía, que sus papás la estaban metiendo en un hospital.
Según TMZ, Bynes deberá permanecer por lo menos 72 horas internada y posiblemente se extienda hasta 14 días. Las negociaciones sobre el futuro de Amanda dentro del hospital es entre el abogado de la polémica joven y los abogados de sus padres.
No es la primera vez que Amanda Bynes es hospitalizada involuntariamente, ya el año pasado, luego de un incidente con fuego, la policía aplicó ese mismos código para internarla.