Al futbolista italiano Alessandro Florenzi poco le importó recibir una tarjeta amarilla con tal de cumplir su promesa.
Este domingo el jugador de 23 años hizo un gol en el partido que su equipo, la Roma ganó 2-0 al Cagliari en la Serie A de Italia. Emocionado subió a la tribuna y abrazó a su abuelita, quien fue al partido con la condición de que su nieto la saludara.
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El reglamento prohíbe a los jugadores interactuar con el público en los festejos, por lo que la amonestación fue bien ganada.
Cuestionado sobre el gesto, Florenzi explicó que su abuela de 82 años, nunca le había visto jugar, ni cuando era niño, así que no tiene arrepentimientos.