Horas en una oficina han obligado a algunos ejecutivos de Nueva York y España a buscar alternativas para relajarse, incluyendo el boxeo.
No aspiran a vivir del deporte de los puños, pues sus trabajos como directivos de empresas o funcionarios les dan para vivir muy bien, lo que buscan es la calma que da descargar todo el estrés acumulado semana a semana.
“El ring se parece a los despachos donde trabajamos, Hay que tantear al otro, averiguar su punto débil y buscar el momento para colocar golpe bueno. Así descargas la tensión”, declaró un ejecutivo que cayó en las redes del adictivo boxeo de cuello blanco que les trae alivio a una vida llena de juntas y tensiones.
White Collar Boxing, es una modalidad de boxeo para ejecutivos que se extiende rápidamente por todo el mundo. El objetivo: hacer una comunidad boxística con directivos de empresas, arquitectos, abogados, banqueros y médicos que disfruten de soltar puños en sus ratos libres.
Uno de los instructores es el ex campeón mundial español Javier Castillejo, quien reconoció que algunos tienen buena pegada.
Pero no solo es cuestión de tomar como terapia los entrenamientos, estos ejecutivos se calzan los guantes y suben al ring frente a un público con miras a que todo lo que se recaude de la función sirva para causas benéficas.
“Lejos de ser un deporte violento, el boxeo fortalece las condiciones de liderazgo como el valor, la precisión, la constancia y el autocontrol. Es un deporte para caballeros, muy apropiado para el mundo de la alta dirección”, declaró Fernando Ayala al medio español, El mundo, el promotor de esta idea que nació en Londres.