El mensaje es claro en sitios como Murrieta, California y Oracle, Arizona: Los inmigrantes indocumentados no son bienvenidos.
Grupos antiimigrantes han expresado su desacuerdo con el arribo de miles de personas, especialmente niños, a la frontera sur de Estados Unidos, en su mayoría provenientes de América Central.
Desde principios de este mes, autobuses llenos de mujeres y niños, han llegado a Murrieta con el fin de instalar a los inmigrantes en centros de detención. Gritos y frases como "Return to Sender" (Devolver al remitente) se han dejado escuchar en las calles de esa ciudad en clara señal de protesta.
En Oracle, un pueblo de escasamente unos tres mil habitantes, los manifestantes antiinmigrantes también se hicieron sentir este martes cuando un rancho de la zona fue habilitado, de manera temporal, para albergar a menores que han llegado solos a la frontera tejana y trasladados a Arizona, de acuerdo con KOLD, afiliada de CNN.
"Estos niños deben ser devueltos a sus países, no a Oracle, Arizona, donde estamos pagando los contribuyentes norteamericanos", dijo el alguacil del condado Pinal, Paul Babeu, en una declaración a través de la página oficial de Facebook de la Oficina del Sherriff.
La agencia AP informó que los antiinmigrantes en Oracle empujaron a un grupo de mariachis y esperaron la llegada del autobús cargado de niños inmigrantes después que las autoridades locales les notificaron que el vehículo estaba por llegar. En un momento determinado, detuvieron brevemente a otro autobús antes de darse cuenta que estaba llevando a niños de YMCA.
El autobús de los niños centroamericanos nunca llegó, y eso puso el broche final a una jornada de intensa protesta en un pequeño pueblo de Arizona al que se acercaron más de 100 personas a favor y en contra del debate sobre la inmigración, precisó AP.
El Sheriff Paul Babeu es conocido por agitar a los manifestantes a través de publicaciones en redes sociales, emisión de un comunicado de prensa y filtración de información sobre la llegada de inmigrantes a un activista local. La Academia Sycamore Canyon de Oracle reconoció que tenía un acuerdo con el Departamento de Salud y Servicios Humanos de acoger a un "pequeño número" de niños inmigrantes procedentes de América Central, pero no especificó ni cuántos ni cuándo llegarían.
Entre 60 mil y 90 mil niños podrían cruzar la frontera al finalizar el 2014 y más de 140 mil podrían llegar en el 2015, de acuerdo con estadísticas de la Casa Blanca. Esas cifras representan más del doble de los 24,668 que ingresaron en el 2013 y el triple de los 13,625 niños en el 2012, según un reporte de Center for Gender and Refugee Studies and Kids in Need of Defense.
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