Reza el dicho popular que el fútbol es un deporte de 11 contra 11, que inventaron los ingleses y que siempre ganan los alemanes.
Alemania derrotó 1-0 a Francia este viernes en el estadio Maracaná y clasificó por cuarta ocasión consecutiva a las semifinales del Mundial. Todo un hito en para cualquier equipo.
Con solitario gol de Mats Hummels el equipo alemán se impuso con claridad a los franceses y enfrentará en la siguiente etapa al ganador de la serie entre Brasil y Colombia, que se juega más tarde.
A tan sólo 13 minutos de haber iniciado el partido Alemania plasmó su superioridad en el terreno de juego. Hummels ganó la posición en el área y remató un centro con precisión para dejar sin oportunidad a Hugo Lloris.
Con el marcador a su favor Alemania puso en práctica su fútbol de toque y se hizo del dominio del balón, ante la falta de poder ofensivo francés.
Pese al dominio teutón, los galos crearon algunas ocasiones de gol en la primera mitad por conjunto de Griezmann y Benzema. Todos los avances fueron bien contenidos por el arquero Neuer.
Para la segunda mitad la tónica fue la misma: Alemania llevó el juego al ritmo que le convenía, mientras que Francia adelantó líneas sin meter en grandes aprietos a la defensa rival, por el contrario dejaron espacios que estuvieron a punto de significar el 2-0.
Miroslav Klose estuvo en el terreno de juego casi 69 minutos buscando el histórico gol que lo convierta en el máximo anotador en los Mundiales, pero nunca tuvo la oportunidad.
Todavía en el último minuto Benzema estuvo a punto de encontrar el empate, pero una vez más Neuer hizo de héroe, desviando el disparo a mano derecha.
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