"Hazme lucir hermosa".
Eso fue lo que Esther Honig le pidió a 40 fotoeditores -- en más de 25 países. Honig, una reportera de noticias de interés humano, compartió una foto de ella a través del sitio Fiverr, para que se editara con Photoshop alrededor del mundo, y así poder notar cuánto los valores culturales se aplicaban a los estándares de belleza.
Honig vio que los individuos de cada país aplicaron sobre su imagen una perspectiva distinta de belleza. Se sorprendió de ver el grado en que los valores culturales de un país pueden mostrar sus preferencias estéticas. Específicamente la foto que recibió de Marruecos, la sorprendió. Esta imagen, según le dijo Honig a The Huffington Post a través de un email, "definitivamente resaltó mi propia falta de conciencia cultural. Claro, alguien de un país donde la principal religión es el Islam elegiría añadir un hiyab (velo islámico) a mi imagen, pues eso se alinea con sus propias costumbres culturales. Para mí, eso realmente añadió profundidad a mi proyecto, tocando el concepto de la religión y las costumbres, no solo de la estética".
Ver que su imagen fue manipulada en tantas dimensiones, hizo que Honig le prestara atención a cosas que antes no había notado tanto, como el tono desigual de su piel, que fue retocado por la mayoría de los editores de foto.
"Photoshop nos permite alcanzar estándares de belleza inalcanzables, pero cuando comparamos esos estándares a escala global, alcanzar el ideal sigue siendo algo ilusorio", según Honig.
MIRA EL RESTO DE LAS INCREÍBLES IMÁGENES:
India
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Venezuela
Argentina
Vietnam
Filipinas
Rumania
Sri Lanka
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Bangladesh
Chile
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Indonesia
La versión original y completa de este artículo fue publicada en HuffPost Women por Amanda Duberman. La traducción es de Marinés Arroyo.