Su nombre es Mary Jose Espinosa y su lucha para que estudiantes indocumentados puedan continuar sus estudios superiores ya es admirable; pero el hecho de que ella nació en Estados Unidos y no tiene problemas migratorios hace aún más noble su causa.
Durante nueve días y junto a otros tres jóvenes, Mary emprendió una caminata desde Charlotte hasta Raleigh, la capital de Carolina del Norte, con el único propósito de difundir y hacer conciencia de cuál es la realidad de un joven indocumentado en ese estado.
Para la mayoría es casi imposible pagar los altos costos de las matrículas, aparte de lo que ya significa lidiar con el sistema migratorio.
Los padres de Espinosa son mexicanos, y a pesar de ella no tener impedimentos migratorios, no está exenta de los problemas económicos que implica su propia educación.
Tuvo que vender tamales y hacer otros trabajos para enfrentar las tarifas escolares en la Universidad de Carolina de Norte en Charlotte, donde espera obtener su diploma y ejercer como trabajadora social.
"Por eso ideamos esta caminata, porque la realidad es que mis amigos no pueden continuar la educación. Al terminar las 140 millas del recorrido hicimos una graduación simbólica en honor de todos esos estudiantes que no pueden concluir sus estudios", explicó a HuffPost Voces.
La caminata comenzó el 9 de junio y concluyó el 17.
En los momentos actuales, estudiantes indocumentados en Carolina del Norte -aún aquellos que se han beneficiado del Programa de Acción Diferida (DACA, por sus siglas en inglés)- tienen que pagar sus estudios con tarifas de no residentes del estado, lo que hace que los costos se les dupliquen o tripliquen en comparación con los universitarios locales.
"Nuestra lucha lo que busca es que los legisladores en el estado entiendan el beneficio de educarnos, de que podamos continuar nuestra preparación universitaria. Somos una inversión para Carolina del Norte", enfatizó Espinosa a HuffPost Voces.
Mira el video tomado por la periodista Caroline Fountain, quien documentó parte del recorrido:
