Este domingo 8 de junio a las 8/7 PM Centro por las cadenas UniMás, Univision y Galavisión se estrena "Metástasis", una nueva y original versión latinoamericana de la serie "Breaking Bad". A horas de ese acontecimiento histórico hablamos con uno de los protagonistas, Roberto Urbina, quien asegura que lo maravilloso de su papel es que es un malo, trastornado, pero adorable, y que él cumple un sueño al hacerlo.
Roberto interpreta a José Miguel Rosa, un alumno de universidad y ayudante de laboratorio que termina enredado en el narcotráfico.
¿Quién es José Miguel, tu personaje en "Metástasis"?
Es un joven bastante vulnerable, que necesita una aprobación. Está tratando de llenar un vacío que hay en él y por eso recurre a las drogas, pero es un personaje que tiene buen corazón... Dentro del contexto de la serie tiene cosas buenas.
¿Qué va a enamorar y qué va a hacer que no te quieran?
La parte menos agradable es que siempre cae en lo mismo, siempre termina embarrándola de una u otra forma, y lo que va a gustar es la vulnerabilidad del personaje, eso va a gustar mucho.
¿Qué significa de enfrentarse a una serie tan grande?
En el set uno trata de separarse de esa presión. Antes de hacer "Metástasis" yo ya era fan de "Breaking Bad", eso fue lo que despertó mi interés en el personaje. Sentí mucho orgullo de poder representar ese personaje, me lo tomé como esas obras de teatro... Por ejemplo, se ha representado mucho "Hamlet" y cada actor le da un matiz diferente; creo que para mí fue un privilegio hacer un personaje como José Miguel.
¿Qué era lo que te impactaba de la serie americana?
Más allá de la historia que me parece muy original, lo que más me llamaba la atención es cómo estaban planteados los personajes. En Latinoamérica tienen la tendencia de crear los personajes en dos dimensiones y no en tres, el malo es malo y el bueno es solo eso; sobre todo esta corriente de televisión rompe estereotipos y crea personajes más reales de la gente buena y mala al mismo tiempo. Se trata de tomar buenas o malas decisiones solamente.
Para muchos será inevitable comparar las dos series, ¿eso es bueno o malo para ustedes?
Sí será inevitable porque estamos haciendo una serie basada en "Breaking Bad" que ha terminado hace muy poco, pero cuando yo vi el capítulo me pasó una cosa muy curiosa, después de los primeros 10 minutos esa comparación se apagó, yo no seguí comparando y eso es muy bueno. Creo que la serie que nosotros hicimos está muy bien planteada, muy bien hecha, muy bien actuada, las personas que estuvieron involucradas lo hicieron muy bien. La gente va a ser capaz de suspender esa faceta.
¿Cuál es el mensaje que te deja esta serie como persona, como espectador?
Esta serie la viví como un estudio de personaje y no desde la parte actoral. Una visión en cómo funciona la mente de una persona que termina siendo corrompida por el poder... Por otro lado lidia mucho con los valores que tenemos como sociedad y como familia y tiene mucho que ver con cuáles son los motivos que nos lleva a vivir la vida a fondo y dejar el conformismo y la apatía.
MÁS SOBRE "METÁSTASIS":
La serie describe la transformación de la vida de Walter Blanco, un profesor de química en la escuela secundaria a quien le diagnostican un cáncer terminal. Tomando en cuenta sus limitadas opciones y escasas finanzas, Walter se da cuenta de que está dispuesto a hacer cualquier cosa para que su esposa embarazada y su hijo con discapacidades disfruten de seguridad económica después de su muerte.
Y así comienza un excitante proceso que lo lleva desde el aula de clases hasta el peligroso negocio del tráfico de drogas, pues decide emplear su extenso conocimiento de química para montar un laboratorio de producción de metanfetaminas en colaboración con un ex alumno, José Miguel.
Una vez que Walter comienza a disfrutar los enormes beneficios económicos obtenidos con la venta de su metanfetamina de alta calidad, y por consiguiente, a ganar poder y notoriedad dentro del mundo criminal de traficantes y carteles de la droga, sufre una metamorfosis irreversible.
Lo que comenzó como una desesperada medida a corto plazo, tomada por una noble causa, se convierte en la vocación de su vida, y el buen hombre que una vez fue se transforma en uno intrínsecamente despiadado y peligroso, aún a sorpresa suya.
Los pasos de Walter en este viaje siniestro serán seguidos muy de cerca por su inocente esposa, Cielo, y por su cuñado Henry, un astuto oficial de la policía de la división de narcóticos, empeñado en descubrir la identidad del nuevo capo de las drogas en la ciudad.
