Antes de que Kim Kardashian entrara a escena, había una estrella que era conocida por su trasero.
Las pompis de Jennifer Lopez eran tan populares que se rumoraba que las había asegurado por alguna cantidad entre los 27 millones o los mil millones de dólares. Hoy día, la actriz de 44 años ha quedado ligeramente opacada por otras estrellas de curvas prominentes, pero en una entrevista que dio este 2 de mayo a la estación de radio en Australia, 2dayFM, Lopez dijo hacer “lo que sea necesario” para conservar su figura, mientras que eso no incluya cirugía plástica.
Cuando se le preguntó si alguna vez ha considerado ponerse implantes en los glúteos cuando sea mayor y su trasero pierda su forma, la cantante, que tiene una canción llamada “Big Booty” en su nuevo álbum, rechazó por completo la posibilidad.
“No. No puedo hacerlo. Honestamente puedo decir que eso es un gran ‘no’ para mí”, dijo Lopez. “Tú sabes, siempre he sido como atleta, y cuando era joven era corredora de pista y jugaba tenis. Así que para mí, siempre se trata de ir al gimnasio o salir a la calle, o lo que sea que haga falta para estar en forma”.
J. Lo dijo que se apegará a comer saludable y hacer ejercicio, añadiendo que no hace falta “volverse loco” o “fanático”. La estrella dijo también que las cirugías le aterran demasiado como para siquiera pensar en someterse a un procedimiento cosmético.