Dura batalla contra el racismo vivió el deporte mundial este fin de semana.
Mientras en la NBA un escándalo de racismo hizo que el presidente Obama se pronunciara. En el fútbol de España un ataque racista a Dani Alves desató la solidaridad de sus compañeros en las redes sociales y el movimiento #Somostodosmacacos.
Durante el juego de Villarreal contra España un aficionado aventó una banana al defensa brasileño. Este en respuesta la tomó y le dio un mordisco ante la sorpresa de todos los presentes.
Neymar, Sergio Agüero y muchos más colegas, colgaron fotos en internet con plátanos, en claro apoyo a su compañero y en declaración de guerra contra las manifestaciones racistas en los estadios.
Neymar y su hijo en la campaña
Sergio Agüero y la futbolista Marta
Brilliant from Sergio Aguero.
"#NoToRacism. We are all equal" pic.twitter.com/ULlyS6eXPX
— FourFourTweet (@FourFourTweet) April 28, 2014
Hulk
En un comunicado, el club Villarreal informó que logró identificar al aficionado que aventó la banana a Alves, por lo que decidió retirarle su carnet de socio y vetarlo de por vida de entrar al estadio.
"Gracias a las Fuerzas de Seguridad y a la inestimable colaboración de la ejemplar afición amarilla, el club ya ha identificado al autor y ha decidido retirarle el carnet y prohibirle el acceso al Estadio El Madrigal de por vida", señala a misiva.
Como se mencionó previamente, esta no es la única batalla abierta de deportistas en contra de racistas. En la NBA, el dueño de los Clippers de Los Ángeles, Donald Sterling, fue captado en un audio, en el que le pide a su novia que "no lleve personas negras a sus partidos".
El terrible audio (aquí lo puedes escuchar en inglés), deja ver una personalidad completamente xenofóbica. El rechazo ha sido total, el presidente Barack Obama calificó de racista lo dicho por el multimillonario. Personalidades como Michael Jordan, Magic Johnson (aludido en el audio) y LeBron James, manifestaron su profunda condena a Sterling, a quien exhortaron a dejar la presidencia del equipo.
En señal de rechazo los jugadores de Clippers arrojaron sus jerseys en el juego de playoffs contra Golden State Warriors, demostrando unidad sin importar el color de piel.