El de por si abrumador juicio que se sigue a Oscar Pistorius por el asesinato de su novia Reeva Steenkamp, tomó tintes aún más dramáticos este lunes cuando el inculpado se descompuso, lloró y vomitó en la corte al escuchar el testimonio de Gert Saayman, médico forense que explicó al detalle las heridas que causaron el deceso de la malograda modelo.
La agencia EFE informó que durante el testimonio, que no fue transmitido como el resto del juicio por su naturaleza explícita, Pistorius se derrumbó al grado de tener arcadas y vomitar, lo que originó a un receso.
Su abogado, Barry Roux, pidió un primer descanso para atender a Pistorius, pero cuando en una segunda ocasión volvió a descomponerse, dijo a la jueza Thokozile Masipa, que continuara porque "no se iba a contener, pues está muy afectado".
Pistorius alega ser inocente, porque disparó a su novia encerrada en el baño la madrugada del 14 de febrero de 2013, por accidente al confundirla con un ladrón.
El diario Récord publicó el análisis de la Dra. Denise Bjorkma, experta en lenguaje corporal, en el que asegura que Pistorius trata de proyectar una imagen de inocencia y dolor ante los medios de comunicación y los tribunales.
Su traje oscuro, casi negro, y corbata con una camisa blanca es fúnebre. Esto es claramente un intento de demostrar duelo y respeto a la autoridad, una cualidad que le faltaba históricamente. Este no es su estilo de vestir, explica Bjorkma.
Es difícil de creer que Oscar se siente herido con la culpa y el dolor, cuando fue visto por los medios de comunicación después del incidente disfrutando una vida social entre alcohol, agrega el análisis.
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