"Las maté a todos", anunció una madre, cubierta de sangre, a los agentes de policía horrorizados, y confesó que había asesinado a sus tres hijas.
La policía de Lecco, en el norte de Italia, que llegó al lugar después de que un vecino alertó sobre la conducta "confundida" de Edlira Dobrusci, de 37 años, encontró en su casa, muertas, a las tres niñas de 13, 10 y 4 años de edad.
La mujer albanesa, dijo Associated Press, fue arrestada tras confesar que realizó el infanticidio con un cuchillo.
Agrega la agencia que "los padres se habían separado y el padre se había marchado el sábado a Albania, y la madre no tenía trabajo", según el coronel de carabineros Rocco Italiano.
"Había dificultades económicas, pero no tan graves que justificaran esto", afirmó.La familia vivía en Italia desde hace 13 o 14 años.
La mujer fue hospitalizada con extensos cortes en sus muñecas y cuello, que se creen se hizo a sí misma.
De acuerdo con el Daily Mail, la mujer se había separado de su esposo y padre de las niñas, quien dejó Italia para volver a Albania el día anterior. Las autoridades allí lo localizaron e informaron de la tragedia.
Los nombres de las niñas eran Simona, Casey y Lindsey, y fallecieron por la pérdida de sangre consecuencia de múltiples heridas de cuchillo. Murieron en sus respectivas camas.
Según informes preliminares, la pareja se había separado y el esposo había vuelto a Albania con su familia.
La mujer se hallaba detenida, acusada del asesinato y iba a comparecer ante un magistrado para el inicio de los procedimientos judiciales. Durante la investigación solo repetía que su esposo la había dejado y que se hallaba en una situación desesperada.