Obama se lo dijo a la cara al republicano John Boenher, presidente de la Cámara de Representantes: "Pruébame que no hay suficientes votos" y así poner fin al cierre parcial del gobierno que entró este lunes en su segunda semana.
"Si los republicanos y el presidente de la Cámara, Boehner, están diciendo que no hay suficientes votos, entonces ellos debían probarlo", reiteró Obama visiblemente molesto en su discurso de este lunes desde la sede central de FEMA.
"Deja que el proyecto de ley vaya a votación y ver que pasa, pero deja que voten", insistió Obama. "Deja que cada miembro del Congreso vote a conciencia y que determinen si quieren o no el cierre del gobierno".
"Mis sospechosas, mi más fuerte sospecha, es que sí hay suficientes votos y que la razón por la que Boehner no ha permitido el voto es porque aparentemente él no quiere ver el fin del cierre del gobierno hasta el momento en que pueda lograr otras concesiones que no tienen nada que ver con el presupuesto", explicó Barack Obama.
Este lunes, se inició la segunda semana del cierre parcial de las labores del gobierno sin que haya una esperanza de acuerdo antes del 17 de octubre, la fecha límite para extender el techo de la deuda.
En Washington lo que prima es el desacuerdo y la animosidad entre los líderes legislativos y una falta visible de liderazgo, según los expertos.
Un comunicado de Harry Reid, líder de la mayoría demócrata en el Senado, acusó a Boehner de tener un problema de credibilidad y le pidió permitir una votación directa a una iniciativa para reanudar las labores del gobierno.
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