Este hombre tuvo una dura semana.
Gentil Ramírez, de Gigante, Colombia, tomó tanto Viagra (el medicamento para la disfunción eréctil) que terminó en el quirófano con una cirugía de pene.
Mientras que varios medios reportaron inicialmente que el pene del hombre de 66 años fue amputado, el jueves Ramírez le contó al diario colombiano La Nación que su hombría permanece intacta.
El hombre quería impresionar a su esposa así que tomó más pastillas azules de las recomendadas. Tuvo una erección durante varios días antes de buscar atención médica.
Los médicos dijeron que su pene estaba inflamado, fracturado e infectado con gangrena. El dañado miembro requirió una cirugía invasiva para evitar que la gangrena se esparciera por todo el cuerpo.
A pesar del drama, Ramírez “se está recuperando bien”, según dijeron los doctores a La Nación.
Una lesión al pena no es el único efecto secundario posible de tomar mucho Viagra.
En 2010, el guitarrista Tom Kaulitz de Tokio Hotel dijo haber consumido muchas píldoras azules y que luego no pudo ver bien durante dos días.
En 2011 se registraron 47 casos de pérdida repentina de audición ligados al consumo de Viagra y fármacos similares.
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